Las multitudinarias protestas de estudiantes sudafricanos obligaron desde el martes a cerrar los campus de las principales universidades del país. La respuesta oficial al reclamo de estudiantes y docentes ha sido la militarización de las zonas donde se encuentran las universidades, represión policial y detenciones por tercer día consecutivo.
Las universidades de Witwatersrand (Johannesburgo), Ciudad del Cabo, Pretoria, Nelson Mandela (en Puerto Elizabet) o KwaZulu-Natal (Durban) suspendieron las clases y todas sus actividades ante las movilizaciones de los estudiantes.
La mayor represión se vivió este miércoles en Johannesburgo, donde alumnos de la universidad de Wits volvieron a marchar por el campus y al momento de realizar un bloqueo en las calles del centro de la ciudad la Policía los reprimió duramente lanzando granadas aturdidoras, gases lacrimógenos y disparando balas de goma. Varios estudiantes heridos han sido atendidos por ambulancias, y al menos dos jóvenes han sido detenidos.
La represión también se vivió en otras ciudades, dejando estudiantes detenidos y heridos. En Puerto Elizabet los estudiantes de la Universidad Nelson Mandela se movilizarón, este jueves, a los tribunales de la ciudad exigiendo la liberación de los 9 estudiantes detenidos.
Estudiantes y docentes, que portaban pancartas con leyendas como “la educación es un derecho” o “acceso para todos”, de la Universidad de Ciudad del Cabo se movilizaron a las puertas del Parlamento sudafricano para llevar sus reclamos, mostrando que la respuesta oficial de represión y persecución a los estudiantes no cumplió con el fin de amedrentar. Por el contrario avivo la llama de las manifestaciones contra las imágenes de violencia policial que recuerdan al Apartheid.
#FeesMustFall ¿qué reclaman los estudiantes?
Aglutinados bajo el lema #FeesMustFall (las cuotas deben caer), los estudiantes protagonizaron en octubre del año pasado la mayor protesta estudiantil desde la caída del apartheid, y lograron una victoria histórica al forzar al Gobierno a revocar la subida de un 6% de las matrículas prevista para este año.
El anuncio del Ministro de Educación sudafricano, Blade Nzimande, sobre el posible aumento en las cuotas de la matricula universitaria hasta un 8 por ciento fue el detonante de las protestas actuales. Pero los estudiantes que vienen reclamando que “las cuotas deben caer” (#FeesMustFall) ven las explicaciones del ministro, seguidas de un anuncio sobre un plan de ayuda para los estudiantes con menos recurso, como un nuevo rechazo gubernamental a su reclamo por una educación gratuita.
Las movilizaciones han conseguido este año que el Ministerio de Educación Superior se comprometa a cubrir el incremento de las matrículas de 2017 para los alumnos de hogares con ingresos menores a 600.000 rands al mes (cerca de 38.700 euros), una concesión que esta lejos de conformar a los estudiantes.
Los estudiantes han anunciado que rechazan cualquier aumento a las cuotas de las matrícula universitaria y exigen un plan que ponga fin a los aranceles universitarios para así lograr la educación gratuita. |