Aunque Maduro afirmó que la llegada del representante de Barack Obama, Thomas Shannon, que ocupa el cargo de el subsecretario de Estado estadounidense, es para conversar sobre las relaciones entre Estados Unidos y Venezuela, el propio Departamento de Estado en la voz de su portavoz, John Kirby, manifestaba que John Kerry en su encuentro en Colombia “urgió al presidente Maduro a trabajar constructivamente con los líderes opositores para abordar estos desafíos (económicos y políticos)".
Por eso la llegada de Shannon, que cada vez que viene se encuentra con representantes de la MUD, es parte activa de la política de Obama en incidir en la política nacional, y en este caso, tal como lo ha hecho explícito el portavoz del Departamento de Estado, está en el marco de las conversaciones entre el gobierno y la oposición.
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La llegada de la representación papal, como sí es más explícito, es para avanzar en las conversaciones que se han venido realizando entre el Gobierno de Maduro y oposición aglutinada en la Mesa de la Unidad Democrática (MUD). Y a estas fechas, ya hay una manifestación de ambas partes de utilizar a El Vaticano como mediador, incluso lo han hecho oficial tal como lo había pedido el Papa en carta enviada el pasado 12 de agosto a través de Ernesto Samper en cuanto representante de Unasur.
Así el Vaticano se activa en la crisis en el país para meterse más de lleno buscando acuerdos entre Maduro y la MUD, con el currículum que trae de actuar en los acuerdos entre Cuba y Estados Unidos así como en los acuerdos entre las FARC y el gobierno de Santos que firmaron recientemente. En la misiva enviada por el Papa y firmada por Pietro Parolin, secretario de Estado del Vaticano y antiguo nuncio apostólico en Caracas, se muestra la intención vaticana de "contribuir a la superación de la crisis que aflige a Venezuela" (léase acuerdos MUD-Gobierno).
Ambas partes, manifestaba el Papa en su carta, deben enviar una invitación al Vaticano "una vez que hayan tomado la firme decisión de iniciar formalmente el diálogo" y también el compromiso asumido de que ambos "estarán más receptivos para acoger las eventuales sugerencias".
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El miércoles, la MUD solicitaba formalmente al Vaticano que sirva como mediador en el diálogo con el Gobierno de Maduro después de que el papa Francisco manifestara su disposición a impulsar estos encuentros. En una carta presentada en Nunciatura Apostólica en Caracas, y que fuera leída por Jesús “Chúo” Torrealba, manifestaban que el Papa “contribuya a impulsar las conversaciones entre el Gobierno nacional y la alternativa democrática (léase la propia MUD)".
Torrealba dijo que con esta comunicación se daba respuesta a la carta enviada por el Papa a Venezuela y que como representante de la MUD, anunciaba que la alianza extiende "una formal invitación al Vaticano a que opere como mediador y como garante moral". Aclaraba que la oposición no había respondido a la misiva enviada por el Monseñor Parolin, porque aguardaba a que el Ejecutivo fijara su posición frente a esta propuesta, remarcando este jueves que “el papa Francisco tiene el peso institucional, el carácter moral y el conocimiento necesario para involucrarse en la grave crisis que vive la nación”.
La presentación de la carta por parte de la MUD se realizaba días después que el Gobierno anunciara que invitó formalmente al Vaticano a incorporarse al diálogo como mediador el pasado viernes 23 que se realiza bajo los auspicios de la Unasur. Jorge Rodríguez, en nombre del PSUV y desde la sede del gobierno central declaraba que "Ya se ha emitido una invitación al Nuncio Apostólico, representante del papa aquí en Venezuela (...) para que se incorpore un representante del papa, de la Iglesia católica en este proceso de diálogo".
Aunque es claro que el diálogo incluye acusaciones cruzadas entre el gobierno y la oposición de derecha como lo muestran los dichos del presidente Maduro al referirse al referéndum revocatorio, e igual manera lo hace la MUD con respecto al mismo tema. Pero este sigue su curso, como se demuestra por las cartas que ambas partes envían al Papa para que media en sus acuerdos.
La pronta llegada de Thomas Shannon al país, fruto del diálogo de Kerry con Maduro, y ahora el anuncio que también vendría la representación del Vaticano, es parte de la política activa tanto de Estados Unidos como del Vaticano, para que entre el chavismo y la oposición se avance en acuerdos hacia una transición política en función de intereses de las clases dominantes. Si bien al momento es poco claro el curso y acuerdos que saldrán de dichas conversaciones, sí es seguro que nada bueno saldrá para el pueblo trabajador y pobre que viene sufriendo una de las más agobiantes crisis económicas de los últimos tiempos.
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