La empresa canadiense NGEx planea avanzar con un proyecto binacional que comprende Argentina y Chile y ya se destaca como el mayor de Sudamérica, superando a Pascua Lama.
Hace unos meses fue presentado al gobierno de San Juan en la Feria Minera. En el informe del mismo se detalló que, con una inversión inicial de 3 mil millones de dólares, extraerá oro, plata y cobre durante 50 años de ambos lados de la cordillera.
En San Juan la explotación se hará a través de minería a cielo abierto, mientras que del lado chileno planean seguir el proceso en una mina subterránea. Para el emprendimiento la empresa anunció la utilización de 500 litros de agua por segundo, que sacarán de un acuífero sanjuanino y la construcción de una línea eléctrica minera de 250 km de largo para completar la demanda de energía estimada en 160 MW.
El avance de este proyecto megaminero cuenta con la legalidad del tratado de Integración Minera y Tratado de Complementación entre Chile y Argentina, firmado en el año 2006, donde se proporciona el marco necesario para procedimientos de estas características en ambos países.
El agua vale más que el oro, la plata y el cobre
Aún no se conoce la magnitud del último derrame de cianuro de Barrick Gold en Veladero y el gobierno del sanjuanino Sergio Uñac busca darle luz verde a este mega proyecto minero. Tampoco parecieran ser un freno las denuncias y la movilización de las comunidades directamente afectadas por estos derrames, que reabrieron el debate sobre la Ley de Glaciares.
Cabe recordar que esta ley aún no puede aplicarse, entre otras cuestiones, ya que los inventarios que debían hacerse sobre las piezas de hielo nunca se terminaron. Pero, a raíz del escándalo con Barrick, diferentes informes y el mismo Ministerio de Ambiente de Nación acaban de reconocer lo que la Asamblea de Jáchal denunció hace tiempo: Barrick asentó la mina sobre zona periglacial, violando abiertamente la ley.
Constelación no será una excepción. Las minas que pretenden instalarse por 50 años lo harán sobre El Potro, uno de los mayores glaciares de la cordillera.
Con una extensión de 2 mil hectáreas, este glaciar nace en La Rioja, se reparte entre San Juan y Atacama, en Chile. Nueve proyectos mineros operaban sobre esta zona protegida en 2012, lo que generó denuncias sobre los riesgos de extinción de esta reserva hídrica.
Los intentos de avance de estas multinacionales, y la complicidad de los gobiernos de turno, vienen encontrándose con la resistencia de los pueblos que no quieren minería contaminante. El desprestigio y repudio contra estas empresas y los funcionarios que gobiernan para ellas, va en aumento. Constelación anticipa una nueva pelea por la defensa del agua. |