En esta sesión se analizó cómo, a partir del 2008, con el trasfondo de la crisis económica y después de importante procesos de la lucha de clases (como en el 2011 en el mundo árabe) surgen nuevas formas de pensar y nuevos fenómenos políticos, los cuales se pueden ubicar tanto en el espectro de la izquierda como de la derecha.
Jimena planteó que en países como Grecia y el Estado Español se manifiesta la búsqueda de una alternativa a la izquierda de la socialdemocracia ya existente, sobre lo cual surgieron y se fortalecieron organizaciones como Syriza y Podemos, respectivamente, las cuales mostraron sus límites políticos y de clase.
En Grecia, donde se dieron una serie de huelgas en contra de los planes de la Troika, el gobierno encabezado por Syriza firmó después de tres meses de asumir, un acuerdo con aquella. En el caso español, donde el movimiento de los Indignados ocupó las plazas, Podemos desplegó una estrategia de “cambio gradual” dirigida a obtener espacios en la administración del estado capitalista.
En Estados Unidos este fenómeno se ha expresado en una polarización de la política. Según la ponente, por un lado, el ex precandidato demócrata Bernie Sanders, quien hablaba sobre los derechos de los trabajadores, las mujeres, migrantes, y que se reivindicaba “socialista democrático” en un Estado donde esa palabra estaba prohibida, atrajo el apoyo de miles de jóvenes y sectores de la clase media.
Si bien fue desplazado para contender a la presidencia por Hillary Clinton, ésta no genera la misma simpatía que Sanders, puesto que representa los intereses de las grandes corporaciones y el establishment y tiene una política imperialista “halcona” hacia Medio Oriente.
Por otro lado, Donald Trump, cuyo discurso apunta al proteccionismo y en contra de las empresas transnacionales, a la vez que propone la construcción de un muro en la frontera con México y la deportación de miles de latinos, cuenta también con una base social muy fuerte.
Si bien el apoyo a Trump es claramente de derecha y en el caso de Sanders expresaba, de forma distorsionada, un sentimiento a izquierda por parte de sus votantes, ambos fenómenos se apoyan en una base social anti establishment contra los políticos de siempre.
Como se planteó desde la exposición, ante la crisis económica, el “neoreformismo” expresado por Syriza y PODEMOS, así como el fenómeno Bernie Sanders, representan una trampa para las masas, pues su programa de reforma al capital es irrealizable, más aún en la situación actual. Más bien buscan desviar cualquier emergencia política independiente del régimen y descargar la crisis sobre los hombros de los trabajadores y los sectores más oprimidos.
A partir de la exposición se dio un rico debate, con varias participaciones que profundizaron y enriquecieron las discusiones sobre el carácter de organizaciones como Podemos y la situación en el Estado Español, así como sobre las perspectivas para los Estados Unidos.
Finalmente, Jimena Vergara planteó que es también en este contexto de crisis económica y lucha de clases que surgen nuevas formas de pensar y el movimiento de masas busca en la política nuevas alternativas. Es ahí donde la izquierda revolucionaria puede emerger como una alternativa, construyendo organizaciones que cuestionen estructuralmente a este sistema y que luche por la revolución socialista, en el camino de construir una sociedad sin explotación ni opresión. | 
