“Nuestra lucha para acabar con el capitalismo no es solo nacional”
Este acto llega en un momento muy difícil para los trabajadores del mundo porque en el corazón del imperialismo asciende al poder un multimillonario racista como Donald Trump. Estos demagogos surgen cuando el capitalismo no encuentra salida a más de 8 años de crisis mundial, con sus crecientes guerras y desigualdades. Hillary Clinton era un exponente de la oligarquía económica y política. Las multinacionales y los bancos siguieron amasando fortunas mientras los trabajadores perdían su empleo y sus casas. Por eso se impuso Trump con la falsa promesa de industrialización. Pero si cruzamos el Atlántico, la Europa capitalista solo ofrece campos de concentración para refugiados e inmigrantes. Seguramente ustedes, al igual que yo, no pueden borrar de su memoria esa imagen de Aylan, el niño que apareció muerto en las playas turcas y que conmovió al mundo. Por eso nuestra lucha para acabar con el capitalismo no es solo nacional, sino que es para terminar con el imperialismo en todo el mundo.
Hoy estamos ante un nuevo escenario internacional, en el cual las medidas monetarias y proteccionistas que podrán tomar gobiernos como los de EEUU significarán condiciones aún más difíciles para países dependientes como el nuestro. Se avecinan nuevas crisis y el super endeudamiento de Macri se hará más costoso aún para los trabajadores. Pero hay que decir que este Frente de Izquierda es el único que repudia esa deuda ilegal, ilegítima y fraudulenta.
“La juventud tiene un desafío enorme: unirse a la clase obrera bajo un programa anticapitalista”
Pero también nos llegan buenas noticias desde el norte. Allí la juventud se levanta contra Trump y se solidariza con los inmigrantes. Esos jóvenes que votaron por millones a Berny Sanders, que se decía socialista y los defraudó llevando esa fuerza detrás de una guerrerista como Hillary Clinton. Nos contaba nuestra compañera Julia Wallace, activista del movimiento negro contra el racismo policial en EEUU, que estas movilizaciones son el comienzo de algo muy importante. A la juventud la vimos movilizarse en todo el mundo: en Francia con decenas de miles en las calles, en Brasil, fueron ocupados más de mil colegios y facultades contra el gobierno golpista de Temer, siguiendo el camino del movimiento estudiantil chileno. Y hablando de este movimiento estudiantil quiero pedirles un fuerte aplauso para nuestra compañera Bárbara Brito, trotskista, feminista y socialista, recién electa vicepresidenta de la combativa Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile. ¡Vivan los combativos estudiantes chilenos!
Esa juventud tiene un desafío enorme que es unirse con la clase trabajadora en todo el mundo bajo un programa y un proyecto anticapitalista, que a diferencia de los reformistas de Podemos en España o de Syriza en Grecia, se plantee una lucha por un gobierno de trabajadores de ruptura con el capitalismo que expropie a los expropiadores como decía Karl Marx y que permita que el avance de la tecnología, no se vuelva en contra de los trabajadores dejándolos en la calle, sino que permita que todos tengamos trabajo, reducir la jornada laboral y que millones accedan a la educación, al arte, a la cultura y al esparcimiento.
“El Frente de Izquierda es la única fuerza que le dijo no al consenso para el ajuste”
A muchos les podrá sonar raro que tengamos este sueño en un país como el nuestro, en el que está por cumplirse un año del gobierno de Macri, un gobierno de ricos para los ricos. El Frente de Izquierda desde el primer momento fue la única fuerza política que le dijo no al consenso para el ajuste, porque si el macrismo pudo avanzar fue gracias al Frente Renovador en Diputados y al Frente Para la Victoria en el Senado, que le dieron los votos para aprobar las leyes de entrega y ajuste como la de los Fondos Buitres, como ese presupuesto de endeudamiento. Eso es lo que hicieron también los gobernadores del PJ y todos los colores políticos aplicando el ajuste. Y ni hablar de la CGT, que ayer marchó, pero dejó pasar la caída del salario y los despidos sin convocar ni siquiera un paro de 24 horas.
“No hay trabajadores de segunda, no hay trabajadores descartables”
Este gobierno de gerentes, su justicia, su policía son parte de un mismo régimen político que defiende el interés de los capitalistas. Esos que tienen fortunas, que viven en lujosos barrios privados; mandan sus hijos a escuelas de elite y se atienden en las clínicas más caras. Sus políticos hacen demagogia con la pobreza cero, pero no tienen ni idea lo que es hacer malabares para llegar a fin de mes, como sucede con más de la mitad de los trabajadores en la Argentina, que ganan menos de $8000 o con los jubilados que cobran la mínima de algo más de $5000. No tienen ni idea lo que es estar en las cosechas de sol a sol desde pibes, como ocurre con los trabajadores vitivinícolas o los ajeros de Mendoza, presentes en este acto. Recuerdo allá por el 2014 durante la heroica lucha de Lear que una compañera trabajadora se paró frente a la policía y les dijo: tengo 35 años, llevo 17 en esta fábrica y tengo hernia de disco, tendinitis y ahora me dejan en la calle sin nada para darle de comer a mis hijos. Lo hablábamos con Luis, un joven obrero de Fate, y nos indignábamos con el trato que reciben esos trabajadores que llaman los "rotos". Jóvenes como él que a sus 32 años no sirven más para la patronal y no puede siquiera sostener a su hijo en brazos.
Nosotros somos el Frente de Izquierda que defiende a todos los trabajadores. No hay trabajadores de segunda, no hay trabajadores descartables. ¡Viva la clase trabajadora! ¡Viva su unidad!
“Somos la izquierda que lucha para recuperar las comisiones internas y los sindicatos de manos de la burocracia”
Seguramente ustedes notan que crece día a día la bronca contra el gobierno de Macri, pero no podemos permitir que esa bronca sea utilizada para la vuelta del peronismo. Muchos depositaron su confianza y expectativa en el kirchnerismo, que gobernó 12 años y la respuesta que encontraron fueron los bolsos de José López; muchos creyeron en el discurso de los DDHH y se encontraron con Milani y el Proyecto X. Nosotros somos la izquierda que está en la primera fila de las luchas, somos la izquierda que fue reprimida en la Panamericana por apoyar a los trabajadores, somos la izquierda que recuerda cada minuto a nuestro compañero Mariano Ferreyra, asesinado cuando luchaba junto a los terciarizados del ferrocarril Roca; somos la izquierda que lucha para recuperar los cuerpos de delegados, las comisiones internas y los sindicatos de manos de la burocracia; la izquierda que se movilizó e impulsó esas movilizaciones enormes junto a estudiantes, docentes y no docentes en defensa de la educación pública; somos la izquierda que pone todo para defender las gestiones obreras como en Zanon y en Donnelley. Esa izquierda, compañeros, que junto a nuestras compañeras es el sector más consecuente y combativo de ese grandioso movimiento de lucha de las mujeres que hizo retumbar el grito de Ni Una Menos. También somos la izquierda que llegó al Congreso y a las legislaturas en muchas provincias, esas bancas que desde el primer momento estuvieron para impulsar la movilización. Y quiero reivindicar a nuestros compañeros diputados: a Myriam Bregman, a Soledad Sosa, a Néstor Pitrola a Pablo López que denunciaron el dietazo de los legisladores. Ya millones comparten nuestra idea, esa que dice que todo funcionario público o legislador tiene que cobrar lo mismo que cobra un trabajador.
“Que el programa del FIT sirva para las organizaciones políticas que quieran hacerlo más grande”
Nosotros hemos logrado con el Frente de Izquierda y de los Trabajadores una unidad muy importante, que más allá de diferencias tácticas casi en la totalidad de los asuntos planteados en el parlamento y en la vida política nacional. Hemos defendido el mandato del programa anticapitalista y socialista del Frente de Izquierda, un programa como el que acordamos para este acto, que nos tiene que servir para abrir la discusión con todas aquellas organizaciones políticas que quieran sumarse para hacer más grande al Frente de Izquierda. También, como ya lo expresaron, tenemos el desafío de dar la pelea por más diputados del Frente de Izquierda. Ya en muchas provincias nos transformamos en una fuerza política muy importante y tendremos que dar una batalla muy especial en la Provincia de Buenos Aires donde los políticos de los capitalistas preparan una guerra encarnizada para manipular el voto de millones. Allí también tendremos que disputar con una fuerza especial la conciencia de millones de trabajadores.
Quiero llamarlos a un compromiso muy importante: todos los que estamos acá damos peleas parciales, participamos en múltiples luchas, todo el tiempo está el Frente de Izquierda al frente, pero tenemos que hacerlo con la fuerza social más importante que tiene el país, que son los trabajadores, la clase social más poderosa, impulsando el Frente Único Obrero para que en cada convocatoria progresiva de las centrales sindicales o de cualquier sindicato golpeemos con un solo puño para exigir que termine la tregua y convoquen a un paro nacional activo y un plan de lucha. Ya lo hicimos juntos el 29 de abril, en esa convocatoria de la CGT y la CTA golpeamos con un solo puño, tenemos que continuar ese ejemplo.
Quiero también pedirles que esta energía que se respira en este estadio la llevemos a cada fábrica, a cada escuela, a cada universidad, a todos los lugares, a los barrios, para hacer que el Frente de Izquierda se transforme en una fuerza arrolladora e imparable.
¡Viva el Frente de Izquierda y de los Trabajadores! ¡Viva la lucha de las mujeres, los trabajadores y la juventud! |