Subieron al escenario para entonar una hermosa versión lírica del himno de los trabajadores, de repente las 20 mil personas que colmaban Atlanta callaron sus voces para escucharlos y la emoción rodeó el estadio.
Fue un momento lleno de belleza, fuerza y sentimiento que al terminar la canción que unifica a los trabajadores socialistas de todo el mundo, hizo vibrar al estadio en un aplauso interminable.
Luego, los miles y miles de asistentes cantaron, ahora junto a los artistas, la Internacional y un solo grito se escuchó: “arriba los pobres del mundo, de pie los esclavos sin pan y gritemos todos unidos viva la internacional…” | 
