Con el sol acompañando la jornada se desarrolló en la tarde del jueves un muy emotivo acto en la casa Mariani-Teruggi, con más de 200 personas entre referentes de derechos humanos, militantes y activistas de diversas organizaciones, familiares y amigos de las víctimas del brutal ataque genocida perpetrado hace cuarenta años y en el marco del cual secuestraron a Clara Anahí.
En el acto tomaron la palabra familiares de los militantes asesinados, amigos y sobrevivientes de la dictadura. La primera oradora fue Cecilia Teruggi, prima de Clara Anahí, quien hizo mención a la ilusión que generó en diciembre pasado la aparición de una joven que se creyó en un principio que podía tratarse de Clara Anahí. Cecilia remarcó que tiene esperanzas y concluyó leyendo un poema.
Siguieron Jorge Peiris, Guillermo David, Cielo Tailmitte, Nicolás Berardi Gau y Ana María Careaga. Se transmitió un video con saludos desde Brasil y otro con el saludo del historiador Osvaldo Bayer.
Especialmente emotivo fue el momento en el que se proyectó un video de Chicha Mariani, quien de esa manera estuvo presente. Allí la abuela de Clara Anahí y madre de Daniel Mariani dijo: “Cuando pienso que ya pasaron 40 años siento que me explota el corazón, ha sido una búsqueda enloquecida, yo misma no puedo creer que pasaron 40 años. Suplico que me avisen si saben algo, lo más mínimo que sea, sobre Clara Anahí. Cumplo 93 años, no me queda mucho tiempo”. Chicha agregó que necesitaba agradecer a todos los presentes por participar en reuniones y en los actos. “Me han fortalecido, siento que alguien tomará la posta hasta que Clara Anahí aparezca”, sentenció.
También el arte se hizo presente para manifestarse de la mano de los músicos Claudia Salomone y Sergio Poli con un poema escrito y leído por Alberto Valera y luego la intervención de una compañía de arte folklórico integrada por Cecilia Porfidio, la hija de Roberto César Porfidio, militante asesinado en la casa, quien dirigió unas palabras haciendo alusión a su manera de homenajear a los compañeros y las compañeras a través del baile.
El equipo de guías de la casa, vestidos con remeras con la leyenda “La historia es Clara” se expresó a través de Agustina Pierres con emotivas palabras cuestionando la política del Gobierno en materia de derechos humanos. A continuación, la presidenta de la Asociación Clara Anahí, Elsa Pavón, en nombre de la misma y de Chicha Mariani agradeció la presencia de todos.
Durante el acto se leyeron muchas adhesiones de organizaciones de derechos humanos, políticas, sociales y culturales.
El Centro de Profesionales por los Derechos Humanos (CeProDH) y el Partido de Trabajadores Socialistas (PTS) estuvieron presentes en el acto, a través de Jorge "Turco" Sobrado, ex detenido desaparecido y quien escribe esta crónica, hija de desaparecidos, acercando la adhesión y convocando a la audiencia del 1 de Diciembre a las 12 horas en la Cámara de Apelaciones de La Plata para que no se le conceda la domiciliaria en el marco de las causas Infierno y San Justo al genocida Miguel Osvaldo Etchecolatz, uno de los asesinos del ataque de la casa Mariani Teruggi.
Una de las primeras nietas recuperadas por Abuelas de Plaza de Mayo, cuando Chicha Mariani era presidenta del organismo, fue María Victoria Moyano Artigas. Ella, también integrante del CeProDH y del PTS, pasó parte de la mañana y la tarde del mismo jueves acompañando a Chicha en su casa.
Marta Úngaro, hermana del compañero desaparecido Horacio Úngaro, convocó entre los presentes al escrache que se hará el 17 de diciembre en Mar del Plata al genocida Juan Miguel Wolk, quien actuó en el Pozo de Banfield, estuvo más de 25 años prófugo y luego violó la prisión domiciliaria.
La jornada tuvo un cierre musical protagonizado por la murga La Gran Puta, integrada por mujeres que cantaron por la vida, contra la violencia de género, por la libertad y la lucha por la justicia. | 
