En el marco del “retiro espiritual” de Cambiemos, la gobernadora bonaerense visitó el encuentro de “Jóvenes y Memoria”. Allí fue escrachada por estudiantes secundarios y debió retirarse.
María Eugenia Vidal debió retirarse antes de tiempo de Chapadmalal. Luego de participar del “retiro espiritual” de Cambiemos, la gobernadora había decidido visitar el encuentro anual que realiza la Comisión Provincial por la Memoria (CPM), el organismo de Derechos Humanos autónomo provincial creado en 1999. Durante el cierre de una de las jornadas, y con la noticia de que Vidal se haría presente para dar un saludo, un centenar de estudiantes secundarios la esperaron con carteles y la abuchearon.
Era la primera vez en años que quien ocupa la Casa de Gobierno de La Plata asistía a ver las producciones de miles de estudiantes en las jornadas organizadas por la CPM. Minutos antes de retirarse junto a su comitiva sin hacer declaraciones, Vidal había presenciado la exposición de cortos audiovisuales de jóvenes estudiantes del partido de Moreno, referidos a la temática de violencia institucional y carcelaria.
Desde la Comisión Provincial por la Memoria, organizadora del evento desde hace 15 años, destacaron que en su breve alocución la gobernadora “se comprometió, para el 2017, a financiar desde el Estado provincial los gastos que las escuelas tienen para trasladarse cada año al complejo turístico” cercano a Mar del Plata. “Vamos a trabajar para que el año que viene puedan resolver el problema de transporte y vengan más chicos”, dijo Vidal antes de ser escrachada por un grupo de chicos.
Las declaraciones de Vidal buscan “despegarse” de lo realizado por el Estado provincial desde el inicio de las jornadas “Jóvenes y Memoria”, que ya lleva 15 ediciones anuales. Miembros de la CPM se mostraron cautelosos frente a la promesa, aunque desde ahora dejan constancia de la misma a la espera de que se concrete y no se transforme en otra de las tantas mentiras de Cambiemos.
Vale mencionar que durante las 15 ediciones anteriores del evento, los miles de jóvenes bonaerenses que participan del mismo deben autogestionarse los gastos del viaje a Chapadmalal o a lo sumo obtienen el “privilegio” de que algún intendente (buscando lógicamente un rédito político por tamaño gesto) ponga a disposición colectivos o combis.