Los cancilleres de Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay celebraron este martes en Buenos Aires la XI Reunión Extraordinaria del Consejo del Mercado Común (CMC), en una jornada marcada por la insistencia de la ministra de Exteriores de Venezuela, Delcy Rodríguez, de asistir al encuentro, al que no había sido invitada y que finalmente se le prohibió entrar.
Por la mañana la canciller había dado declaraciones a la prensa señalando que "si insisten en que no participe en la reunión nos meteremos por la ventana, porque vinimos a defender los derechos de Venezuela", luego de reunirse con su par argentina, Susana Malcorra, quien le insistió que se abstuviera de presentarse en la cita.
Esta fue la primera reunión ministerial después de que el pasado 2 de diciembre, los países fundadores del Mercosur comunicaran a Venezuela que cesaba de ejercer sus "derechos inherentes" como Estado parte, con un trasfondo más político que las supuestas argumentaciones de que Venezuela ha incumplido el Protocolo de Adhesión, aun pese a estar ejerciendo la presidencia rotativa en ese momento. Una decisión que ha tenido el apoyo de la oposición aglutinada en la llamada Mesa de Unidad Democrática (MUD) en momentos en que se vive una tensión política interna.
El objetivo de la sanción, perseguida hace meses por el gobierno de Argentina, Brasil y Paraguay, era el de enviar un claro mensaje sobre el giro a derecha que vive la región, aislando al gobierno de Venezuela y envalentonando a la oposición de derecha del país.
Venezuela, que se adhirió oficialmente al bloque en 2012, reitera que esta situación es ilegal ya que según el gobierno de Maduro el país se ha incorporado a un 95 % de la legislación que los Estados deben cumplir para su adhesión al organismo. Para volver a ingresar al bloque el gobierno de Maduro necesitará renegociar los términos de su membresía de acuerdo con las reglas de Mercosur, pero todo indica que se puede abrir un proceso que dure años y que los gobiernos de los países fundadores del Mercosur terminen bloqueando en forma indefinida el reingreso de Venezuela al bloque.
El que Argentina haya asumido este miércoles la presidencia formal pro tempore del Mercosur es un claro indicativo del portazo definitivo dado a Venezuela. El gobierno de Maduro ha venido denunciando lo que llama la confabulación de una Triple Alianza conformada por Argentina, Brasil y Paraguay para sacar a Venezuela del organismo regional.
Por eso es que la canciller Delcy Rodríguez declaraba este miércoles desde Buenos Aires, en un mensaje en Twitter, que "Los cancilleres de la Triple Alianza confabulados contra Venezuela y el MERCOSUR se niegan al diálogo con Bolivia y Venezuela", a la par de una foto en la que se ve una mesa de reuniones oficial vacía, sin la presencia de los ministros de Uruguay, Argentina, Brasil y Paraguay.
Al mismo tiempo, el canciller brasileño, José Serra, colocó en su cuenta de la misma red social una foto en la que se le ve en otra sala junto a sus homólogos de Argentina, Susana Malcorra; Paraguay, Eladio Loizaga, y Uruguay, Rodolfo Nin Novoa, con una nota señalando: "Estoy reunido con los cancilleres de Argentina, Paraguay y Uruguay, en Buenos Aires, para la XI Reunión Extraordinaria del Consejo de Mercosur".
En horas más tarde, Delcy Rodríguez, aseguraba que fue agredida por un policía a su llegada a la Cancillería argentina y por un funcionario en el interior del edificio, asegurando que se trata de "una venganza personal" del presidente Mauricio Macri, por lo que había acontecido en la última reunión en Paraguay donde la canciller venezolana lo había tratado de injerencista.
En declaraciones a la prensa, la ministra explicó que la agredieron en "términos muy extremos" cuando ella se plantó ante la policía. "Frente a los escudos levanté las manos y dije ’soy la canciller de Venezuela’ y en ese momento no me di cuenta y un policía me golpeó al igual que al resto de mi delegación", aseguró Rodríguez, tras lo que añadió que, cuando intentó ingresar en la sala donde se encontraban reunidos los cancilleres de Brasil, Uruguay, Paraguay y Brasil, un funcionario la tomó por el brazo y la sacudió.
Cínicamente la canciller argentina, después de tomar la batuta de Mercosur y sacar a Venezuela del bloque regional declaraba que hasta ahora ha habido una serie de cosas "que no facilitan y ponen límites" a la integración interna, por lo que es difícil "salir a venderse en el mundo si uno no está integrado intrarregionalmente". Lo declaraba justo en el momento en que sacan a un país por motivos esencialmente políticos que técnicos, y toma la batuta de dicho organismo regional.
Desde La Habana, Cuba, donde se encontraba el Presidente Maduro por acto de celebración del 12 aniversario de la fundación del ALBA, denunciaba la agresión que habría sufrido la canciller Delcy Rodríguez. No se sabe aún qué connotaciones tomará la situación del martes en Buenos Aires, pero Maduro ya anunció que tomará medidas políticas. Lo que sí es claro, es que todo suma más tensión política entre los países del Mercosur y en particular con el gobierno de Macri. |