La última semana mostró a una María Eugenia Bielsa mucho más activa. Esta importante figura del peronismo provincial, que reúne un gran caudal de votos, dio a conocer algunas de sus ideas hacia las elecciones provinciales del 2015. Críticas y elogios a las diferentes alas del PJ de Santa Fe y un encuentro con el Partido de la Ciudad Futura y Carlos Del Frade fueron parte de su agenda
Luego de renunciar a su cargo como diputada provincial en febrero del 2013, con fuertes denuncias al actual Ministro de Defensa, Agustín Rossi, por “traicionar al movimiento peronista” y por sostener acuerdos espurios con el socialismo en la provincia de Santa Fe, parecía que la ex vice gobernadora se había tomado un tiempo para alejarse de los avatares del peronismo provincial. Sin embargo en las últimas semanas se vio a una Eugenia Bielsa mucho más activa delineando posibles ejes para el peronismo santafesino en vista a las elecciones del 2015.
Sin lugar a dudas, la noticia de la semana en este sentido, es la declaración brindada el domingo a Rosario 12. Las declaraciones allí vertidas, seguramente, fueron una bomba para algunos sectores del pejotismo. María Eugenia Bielsa sostuvo que el ex gobernador Carlos Reutemann no debería ser excluido del armado electoral del peronismo santafesino. Reivindicó las políticas de obras públicas y de producción de las gestiones del ex corredor de carreras. Un elogio poco fortuito a un político repudiado por la negligencia en la prevención y en el manejo de las inundaciones que asolaron a la ciudad de Santa Fe en el 2003, que dejó un saldo de 23 víctimas fatales y 28.000 viviendas afectadas.
Las declaraciones de Bielsa se dan a una semana de que Reutemannsaliera al cruce contra el gobierno provincial y municipal, en un pase de facturas cuyo principal mérito fue la hipocresía de los bandos enfrentados. El llamado a este nefasto personaje de la historia política santafesina, responde seguramente al intento de recuperar sectores del peronismo no kirchnerista que se fugaron hacia el armado de Miguel del Sel y del PRO.
Sin embargo María Eugenia Bielsa no jugó de local únicamente. Días antes de estas declaraciones, el 5 de noviembre, la ex diputada se mostró en una charla titulada “La provincia, la ciudad y los modelos en pugna” organizada por el Partido de la Ciudad Futura, de Juan Monteverde. El panel reunió por un lado al mismo Monteverde, al candidato a diputado provincial Carlos Del Frade, al ex presidente de la Federación Agraria, Pedro Peretti y a la misma Eugenia Bielsa. Como es de esperar el blanco de las críticas estuvo puesto en el modelo de provincia y de ciudad del socialismo. El desenfrenado boom inmobiliario de la ciudad de Rosario y las políticas de favorecer a los grandes pooles de siembra y a los puertos exportadores fueron parte de denuncias propinadas al espacio de Bonfatti y Fein.
Pero no fueron solo críticas. Como titula la nota publicada por Giros, Con muchos puntos de encuentro, no faltaron elogios. Aparte de coincidir en lo que no se debe hacer a la hora de gestionar la provincia y la ciudad, los panelistas remarcaron trayectorias e ideas comunes que los unen. Por su parte Bielsa, salió a reivindicar una vez más la labor conjunta con Giros en los momentos en que fue concejala de la ciudad de Rosario. Del Frade y Monteverde, mostraron la necesidad de enfrentar al agotamiento del modelo “socialista” en un llamado a la una unidad cuyos límites son poco claros.
Sin lugar a dudas la ex diputada se juega a un armado peronista “inclusivo” que va desde lo que queda del kirchnerismo santafesino hasta los sectores más rancios del pejotismo provincial como Carlos Reutemann. En un intento de concretar una fórmula más competitiva en el marco de un kirchnerismo que nunca hizo pie en Santa Fe y en franco retroceso, un Frente Progresista que lleva en su haber una innumerable cantidad de crisis políticas y un armado como el PRO que aglutinó a sectores del peronismo reutemista y obedidista, Eugenia Bielsa también incursiona en sectores de la izquierda y centro izquierda. Habrá que esperar la respuesta de este espacio político, tironeado entre la centroizquierda de De Gennaro y los restos del “progresismo” kirchnerista en función de los armados hacia el 2015.