Soledad Cuello desde hace años viene llevando adelante la búsqueda de su hermana, secuestrada por redes de trata. La campaña por Soledad convirtió el caso en un paradigma de la lucha contra el crimen organizado que, según señalan numerosas organizaciones feministas, tiene en Córdoba su propio “Mercado de Liniers”. Recordemos que Yamila Cuello desapareció en octubre de 2009, en bario Coronel Olmedo, de la ciudad de Córdoba y fue su hermana, ante la inacción de la policía y la justicia, quien comenzó su búsqueda con la "Coordinadora por la Aparición con Vida de Yamila Cuello".
Soledad manifestó a La Izquierda Diario que “ya van a ser casi cinco años que mi hermana Yamila no está conmigo. A mí, la Secretaría de la Trata no me ayuda, yo hice y hago de todo para buscarla y ellos solo me ofrecieron diez mil pesos para hacer afiches, la policía no hizo nada tampoco. A ella la desaparecieron, no se fue sola como me quieren hacer creer”. Además, comentó que las organizaciones de mujeres, vecinas y vecinos quienes la ayudan, “no De La Sota, ni la Chiofalo [ex titular de la Secretaría de Prevención y Tratamiento de Víctimas de Trata, de la provincia], que la tuve que escrachar para que responda mis llamados. Yo llamo y llamo a la fiscalía, hoy la causa de mi hermana no avanza porque no la están buscando”.
Soledad también manifestó que en el Encuentro Nacional de Mujeres, realizado el año pasado en la provincia de San Juan, intentó formar una red para buscar a Yamila y todas las chicas desaparecidas, pero que es difícil conseguirlo, por el miedo a las consecuencias que puede traerle a las personas que se comprometan. “Yo entiendo, pero hay que superar el miedo porque queremos que aparezcan y hay que hacer de todo para que estén con nosotros”, agregó. Por ello, también argumentó que la salida para encontrar a las desaparecidas “es la búsqueda real de las víctimas y pese a quien le pese, las trabajadoras sexuales son las que te ayudan”.
En la Universidad Nacional de Córdoba
El pasado 28 de agosto, se llevó a cabo un taller en la Universidad Nacional de Córdoba, en el marco de la Jornada Contra la Violencia Machista, en el que participó Soledad Cuello. Allí se discutió sobre la trata de personas y el trabajo sexual. Participaron activistas del movimiento por la diversidad sexual, la Red por el Reconocimiento del Trabajo Sexual, el Movimiento Enrique Barros y la Asociación de Mujeres Meretrices de Argentina, entre otros.
El debate se centró sobre la controversial Ley 10060 de Córdoba, la aplicación del artículo 45 del Código de Faltas que sanciona la “prostitución escandalosa” y sobre los casos emblemáticos de trata, de Marita Verón en Tucumán y Yamila Cuello en Córdoba. |
