El gobernador de Chubut, Mario Das Neves, luego de acusar a los miembros la comunidad mapuche de Cushamen de terroristas y violentos, salió despegarse de los episodios represivos propinados contra los manifestantes. Según Das Neves el responsable de todo es el juez federal que ordenó el accionar de las fuerzas policiales, Guido Otranto. “Fue el que originó todo” y “debe hacerse responsable”, aseguró.
El mandatario provincial habló en una conferencia de prensa en Esquel, y aseguró que Otranto “es el mismo juez que los liberó”, en alusión a la liberación previa de un dirigente del grupo Resistencia Ancestral Mapuche (RAM) acusado de ocasionar incendios.
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Das Neves intenta desligarse burdamente de la responsabilidad por los hechos que generaron un amplio repudio. Sin embargo, no deja de legitimar en cada una de sus declaraciones el atropello y la violencia perpetrada contra los manifestantes que reclaman legítimamente sus tierras ancestrales. "Hay que terminar con esto de hacer política con el tema de la represión. Eso tiene patas cortas" sostuvo y agregó en relación a la cobertura periodística del caso que “lejos de preocuparse por la situación de los mapuches, esto lo toman como una cuestión progre, cool".
Por otro lado se refirió al repudio manifestado por el Equipo Nacional de Pastoral Aborigen (Endepa) de la iglesia. "Se tendría que preocupar por temas de pedofilia, abuso, y no salir con el facilismo con el que han salido".
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Para que no quepan dudas, el gobernador volvió a acusar a los mapuches integrantes del RAM, de revoltosos con segundas intenciones. "Vienen a desordenar lo que ordenamos entre todos, no sabemos de qué viven. Tenemos algunas sospechas de quiénes los bancan, pero lo que pedimos es seriedad y tener memoria". El funcionario massista, asegura que en su gestión anterior, se entregaron 480 mil hectáreas a las comunidades aborígenes y mapuches. Mucho menos que las 900 mil que acapara ilegítimamente y en clara violación a las leyes argentinas, el grupo Benetton. |