En la marcha del contrainforme asistieron en su mayoría trabajadores del sector salud de la ciudad de puebla, tanto activos como jubilados, alertando sobre la próxima privatización del sector salud. También estuvieron presentes los trabajadores despedidos del gobierno del Estado de Puebla.
Varios varios contingentes salieron del Gallito del Paseo Bravo al zócalo del Ayuntamiento de Puebla, el cual está resguardado por granaderos al igual que el congreso Estatal.
Previamente algunos activistas habían hecho declaraciones de que la administración del gobernador panista se caracterizó por hacer un despilfarro de los recursos públicos, daños ambientales y culturales y violaciones a los derechos humanos. También se dijo que Moreno Valle utilizó a la entidad poblana como un laboratorio de las reformas estructurales, como fue el caso de la Ley Bala, la privatización del agua y la criminalización de la protesta social.
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