El caso de corrupción vinculado a la constructora brasileña Odebrecht que ya tiene en vilo a gran parte de la clase política de ese país, se extendió por todo el continente y salpica a políticos y funcionarios de la región. En Perú uno de los más comprometidos es el expresidente Alejandro Toledo, que habría recibido sobornos millonarios, pero también están involucrados Alan García y Ollanta Humala.
La justicia peruana ordenó el jueves el arresto preventivo por 18 meses de Toledo, acusado de recibir sobornos de la constructora brasileña Odebrecht para ganar contratos durante su gobierno.
El juez Richard Concepción dispuso además que se emita una orden de captura nacional e internacional de Toledo, acusado de recibir pagos ilícitos de Odebrecht por unos 20 millones de dólares, a cambio de la concesión de dos tramos de la carretera interoceánica en su gobierno en el 2005.
Según la fiscalía, existe evidencia que 11 millones de dólares de ese monto fueron transferidos a la cuenta de un socio del ex presidente, que los fiscales creen que está involucrado en los pagos de sobornos de Odebrecht.
El exmandatario, que hasta el sábado estaba en París, Francia, ha rechazado las acusaciones, por lo que el juez giró la orden de captura a nivel nacional e internacional.
Los cargos de los que se acusa a Toledo, que gobernó el país entre el 2001 y 2006, son tráfico de influencias y delito de lavado de activos. "Como mínimo, le espera ocho años de pena privativa de la libertad en el mejor de los casos", agregó el magistrado.
Un escándalo internacional
Odebrecht, involucrada en el mayor escándalo por sobornos de la historia de Brasil, reconoció en un acuerdo judicial en Estados Unidos en diciembre que pagó unos 29 millones de dólares para ganar obras públicas en Perú entre 2005 y 2014, durante los gobiernos de Toledo, Alan García y Ollanta Humala.
El actual presidente peruano, Pedro Pablo Kuczynski, un banquero y empresario que fue ministro de Economía y primer ministro de Toledo, se despegó rápidamente afirmado que no está involucrado en los pagos de sobornos de Odebrecht. Sin embargo los escándalos no paran de sumar nuevos nombres semana a semana.
La ramificación del caso Odebrecht, que en Brasil es conocido como Lava-Jato e involucra a cientos de políticos de todos los partidos, se extiende por todos los países en los que la empresa constructora tuvo negocios.
En las últimas semanas se conoció que Gustavo Arribas, jefe de la Agencia Federal de Inteligencia de Argentina habría recibido sobornos por parte de un operador de la empresa brasileña. Mientras que esta semana el caso también salpicó al presidente de Colombia, y políticos de Venezuela y Ecuador. |