Mientras Leonardo Fariña, el “arrepentido de la ‘ruta del dinero K’” –como lo llaman los medios oficialistas- cenaba el lunes 13 en casa de un amigo en Parque Chacabuco, se desató un confuso episodio. Cuando uno de los custodios de Fariña se disponía a mover de lugar el auto del empresario, un Volkswagen Fox de color rojo se detuvo a su lado y descendieron dos hombres con armas de fuego. Según trascendió, le exigieron al cabo primero Virginio Ramón Piedrabuena las llaves del Peugot 308 de Fariña, pero el custodio dio la voz de alto y comenzó un largo tiroteo.
Como resultado, uno de los agentes fue herido de bala, uno de los asaltantes murió y el resto se dio a la fuga. Lo llamativo del hecho fue que en la balacera se efectuaron cerca de 100 disparos. Hasta ahora, la hipótesis más convincente es la de intento de robo. Pero no se anula la posibilidad de que haya sido una intimación deliberada.
Fariña había dejado afuera su vehículo, un Peugeot 308, con custodia del Grupo Albatros, el equipo especial que vela por la seguridad de quienes integran el Programa de Testigos Protegidos.
Según reveló el portal Infobae, cuando el agente Piedrabuena se identificó como prefecto y desenfundó su arma, comenzó la balacera. Inmediatamente se sumaron otros miembros de seguridad, que estaban en la puerta del edificio realizando la custodia hasta que Fariña saliera.
Uno de los asaltantes pudo huir en el auto en el que habían llegado y otro fue abatido en la calle, en el cruce de las calles Zuviría y Thompson. Hasta ahora, no se reveló la identidad de la persona fallecida. El agente herido ya fue dado de alta ya que se encuentra fuera de peligro.
No es la primera vez que Fariña sufre un incidente de este tipo. En octubre de 2016, el auto de uno de sus custodios fue baleado en la puerta del domicilio del “ex valijero”. |