La lucha de las 36 obreras textiles de Neuquén cumple 3 semanas. 3 semanas de ocupación. De acciones en la ruta. De escraches. De colectas solidarias en los lugares de trabajo y de estudio, en las plazas y en eventos masivos. De caravana, maquinazo, festivales y muestras solidarias. De audiencias y más audiencias que al finalizar nos reafirman que será una lucha dura.
Las "leonas" protagonizan un conflicto testigo en la región. Frente a tantos dirigentes sindicales arrastrados que dejaron pasar miles de despidos (como Guillermo Pereyra, Secretario General de Petroleros Privados y senador del MPN), estas mujeres, madres de familia, sostén de hogar, algunas más jóvenes y otras por encima de los 50, nos están dando una clase de resistencia.
Es por eso que desde el primer día vienen recibiendo enormes muestras de solidaridad, de otros trabajadores, estudiantes, y de la comunidad en general. En cada colecta, en cada paquete de yerba que una familia alcanza a la fábrica, se nota que la comunidad de Neuquén está junto a las obreras.
Son 36 obreras enfrentando a un enemigo poderoso, con lazos con el gobierno provincial del MPN, el gobierno municipal del Pechi Quiroga, jueces y funcionarios de distinto rango a lo largo y ancho de la provincia.
Caso testigo
El caso de las obreras textiles, es un caso testigo, junto a la ocupación de AGR - Clarín por parte de los obreros gráficos. No sólo porque no se resignan a quedar sin trabajo. Sino porque son el anuncio de lo que se viene en un 2017 en el que, por lo que se vivió hasta ahora, ni la proximidad de las elecciones hizo "bajar un cambio" al ajuste macrista. Todo lo contrario. 9.326 y 5.900 suspensiones sólo en enero. Se multiplicaron los cierres, se avanzó en un convenio flexibilizador como en Vaca Muerta. Se le quiere imponer un techo salarial del 18% a los docentes, por debajo de la inflación. Es un ajuste al conjunto del pueblo trabajador, de la juventud, de las mujeres, en beneficio de los grandes empresarios, nacionales y extranjeros.
Los tarifazos en la energía, el agua, en el precio del colectivo, van a hacer cada vez más difícil sostener sus estudios a todos los jóvenes de familias trabajadoras. Sin ir más lejos, nuevamente la Universidad del Comahue anuncia su crisis presupuestaria, y los docentes de los distintos niveles preparan (en muchos casos, a pesar de sus conducciones), el no inicio de clases.
El gobierno y las patronales demuestran que no tienen límites. Sólo retroceden ante el repudio popular y la movilización en las calles.
Pero el de Textil Neuquén es además un caso testigo porque demuestra los lazos entre los empresarios vaciadores y funcionarios del Estado. Sin ir más lejos, mientras el pueblo padece los tarifazos, a los dueños de Textil Neuquén les llegaban boletas de $0 de gas. Al propio gobierno "no le importa" si la patronal paga la deuda con el IADEP. Para los empresarios vaciadores, todo. Para los obreros y obreras de Zanon, que hace años reclaman un crédito para sostener la gestión obrera que da de comer a casi 300 familias, nada. Toda una demostración del carácter de clase de este Estado capitalista.
Si ganan las textiles, ganamos todos. Por eso las centrales sindicales deberían ponerse a la cabeza de la lucha contra el cierre de la Textil Neuquén, contra los despidos, contra el ajuste. Y por eso es necesario multiplicar la solidaridad desde cada lugar de estudio y de trabajo, y ponerle el cuerpo a la lucha, hasta que consigan una respuesta que garantice el 100% de los puestos de trabajo.
¿Qué papel puede jugar la juventud?
Desde el minuto 0 de esta lucha, los estudiantes, universitarios, terciarios, secundarios y trabajadores de la Juventud del PTS - Frente de Izquierda de Neuquén y Río Negro, junto a nuestros compañeros y compañeras ceramistas, docentes, estatales, papeleros, petroleros, junto a nuestro diputado Raúl Godoy, venimos bancando a las obreras. Con compañeros y compañeras independientes hemos participado de todas y cada una de las acciones que definieron las obreras, proponiendo y organizando otras tantas. Junto al Centro de Estudiantes de Bellas Artes, hemos organizado festivales en la puerta de la fábrica. Recorrimos los ingresos de la UNCo, la colecta en la Fiesta de la Confluencia. Somos a su vez las y los que le ponemos el cuerpo a las guardias en los portones, en 3 turnos diarios, las 24 horas, compartiendo largas charlas con las "leonas" que inspiran a seguir luchando. Pero no alcanza.
La lucha textil se está convirtiendo en una gran causa popular. Y creemos que es hora de retomar las mejores tradiciones de la juventud y el movimiento estudiantil de la región, para recrearlas. Ese movimiento estudiantil que en los ’70 apoyó el "Choconazo" de los obreros de la construcción, aportando a su fondo de huelga y donando los víveres del comedor universitario. Que se organizó en la UNCo para conseguir que el conjunto de la comunidad universitaria apoyara la gestión obrera de Zanon, logrando que el Consejo Superior sesionara en el puente Neuquén - Cipolletti y firmara un convenio marco con los ceramistas. O que, desde la Escuela de Bellas Artes, puso el arte a disposición de la lucha por la expropiación de la fábrica sin patrones. Hay que retomar esa unidad obrera - estudiantil, de la que los propios ceramistas también hicieron bandera acompañando las distintas luchas en la Universidad del Comahue, por una educación pública al alcance de los hijos de los trabajadores, o apoyando la pelea por el edificio propio para la Escuela de Bellas Artes.
Los Centros de Estudiantes y Federaciones deberían ser grandes herramientas de organización del movimiento estudiantil, que se organicen democráticamente, de abajo hacia arriba. Que luchen en defensa de la educación pública, por el presupuesto educativo, en defensa de las condiciones de cursada de los estudiantes y de trabajo de los docentes. Pero también están llamados a jugar un rol con el conjunto de los trabajadores contra el ajuste que está en marcha.
No da lo mismo que la juventud participe o no de la lucha de las obreras. Está planteado preparar una gran campaña de solidaridad, realizando colectas con la comunidad, agitaciones en los espacios públicos y en el transporte, logrando el pronunciamiento de todas las autoridades en defensa de las textiles; como también en apoyo a la lucha de los obreros y obreras ceramistas que están atravesando una difícil situación y exigen un crédito para poder renovar la maquinaria.
Las mujeres y la juventud también estamos llamadas a encabezar un contundente paro de mujeres de cara al 8 de marzo. El movimiento que tuvo expresión en el #NiUnaMenos y distintas movilizaciones en Argentina, y que hoy se extiende hasta el centro del imperio, con movilizaciones contra Trump y expresiones anti-capitalistas, se tiene que expresar en apoyo a esas "leonas" del Parque Industrial de Neuquén, que hoy recuerdan la historia femenina del movimiento obrero. Como se empieza a comentar, "el paro de mujeres ya empezó" en la Textil.
A diferencia de esa "juventud militante" del mal menor, que se multiplicó de la mano del kirchnerismo al calor de gestionar el Estado y hoy no es capaz siquiera de "enfrentar a la corpo" de Clarín apoyando a los obreros de AGR; a diferencia de los que hoy se paralizan al comprobar que su "jefa" llevó al frente del Ejército a un genocida; de los que hablan contra los ataques de Macri pero en las provincias en que gobiernan (como Tierra del Fuego y Santa Cruz) hacen lo mismo; es necesaria una juventud militante que se plante contra el ajuste. Que confíe en esa poderosa alianza con los trabajadores, en desplegar esa fuerza social para que la crisis no la pague el pueblo, sino los capitalistas.
Es por eso que, al mismo tiempo que nos jugamos el todo por el todo con las obreras textiles, y nuestros compañeros en Buenos Aires hacen lo mismo con los obreros de AGR - Clarín, aportando miles de pesos a su fondo de lucha, creemos que es necesario organizarnos. Queremos invitar a los compañeros y compañeras que vienen acompañando estas peleas con nosotros y se identifican con el Frente de Izquierda, a formar grandes agrupaciones en cada facultad, colegio y terciario. A multiplicar la fuerza de las mujeres organizadas en la agrupación Pan y Rosas. Necesitamos agrupaciones que impulsen Centros de Estudiantes democráticos y combativos, que movilicen a cientos de jóvenes a las principales medidas de lucha, hoy de las Textiles y mañana de las luchas que vendrán.
Nos espera un año movido, y nuestro desafío es estar a la altura de enfrentar a los ajustadores con la fuerza de los trabajadores, las mujeres y la juventud. ¡Te invitamos a sumarte! |