La vulnerable economía mexicana sigue haciendo ajustes de acuerdo a los mandatos orquestados por el gobierno del país vecino del norte. Las medidas anunciadas y la especulación por la construcción del muro y los impuestos a las remesas sobre todo, ha vuelto a obligar a los funcionarios mexicanos a repensar el norte de nuestra economía.
En el presupuesto contemplado para este año, la SHCP había pronosticado un crecimiento de 2.5%, del Producto Interno Bruto (PIB), sin embargo, el último día de febrero el titular de la secretaría, José Antonio Meade, anunció un nuevo recorte de casi un punto porcentual para ubicar la expectativa decrecimiento formalmente entre un 1.7 y 1.5%.
En la entrega de premios a jóvenes innovadores participantes del concurso #ApplicandoMX realizada el mismo día, Meade afirmó que por el momento, el gobierno nacional no está en condiciones de plantear estrategias, debido a la poca información que se tiene sobre las posibles modificaciones fiscales que Estados Unidos y su presidente Trump han anunciado de manera informal.
El escenario económico mexicano muestra cada vez más su subordinación a la tendencia establecida por la economía estadunidense, y el tema del impuesto a las remesas podría ser solo la punta del iceberg para los problemas de nuestra economía interna.
Se espera un escenario económico complejo para este 2017, en el que la clase trabajadora y los sectores populares verán perjudicada su economía familiar. |