El candidato obrero y anticapitalista en las presidenciales francesas
La candidatura de Poutou muestra la fuerza de los despreciados, los explotados y los oprimidos cuando ellos y ellas se unen para luchar por otra sociedad, al revés de los intereses defendidos por los grandes candidatos. La lucha contra la explotación, contra la ley de los patrones, contra el racismo y la violencia policial y por los derechos de las mujeres está presente en la voz de Poutou.
La campaña electoral en Francia está teñida de escándalos de corrupción, desnudando la crisis de régimen que atraviesa ese país. François Fillon fue el primero en el banco de los acusados por fraude, aunque no está solo, lo acompaña la familia Le Pen, por el caso de los empleos ficticios. También por Emmanuel Macron, por haber utilizado la plata de Bercy para financiar su movimiento ¡En Marcha!, sin contar a todo el resto de la casta política que, legalmente, gana 7 veces más que un trabajador.
Contra la violencia y brutalidad policial
La violación de Théo el pasado 2 de febrero por parte de la policía hizo estallar enormes movilizaciones contra es brutalidad que es moneda corriente en los barrios obreros y de inmigrantes. Durante las luchas contra la ley de trabajo, la policía se encargó de reprimir cada una de las manifestaciones, con gases, palos y detenciones. Frente a esto, todos los grandes candidatos, de Jean-Luc Mélenchon a Marine Le Pen, quieren aumentar los efectivos policiales. Para el candidato socialista Hamon y para Mélenchon, de Francia Insumisa, se puede reformar la policía, a través de “formarla” y excluir los elementos más reaccionarios.
La voz de Poutou expresa algo totalmente diferente. Para terminar con la violencia policial, es necesario levantar el Estado de urgencia, legalizar el cannabis, imponer el derecho de reunión, de libre expresión, de protesta, pero también diciendo claramente que las fuerzas represivas, que humillas y reprimen, deben ser disueltas. Son los asalariados, los jóvenes, los vecinos de los barrios quienes pueden garantizar su propia defensa.
Contra la explotación capitalista
Mientras Emmanuel Macron intenta hacer creer que la juventud puede hacerse millonaria trabajando 70 horas semanales por un sueldo mínimo, y Hamon, quien nunca trabajó para otra cosa que no sea el aparato del Partido Socialista, promete 700 euros por mes eliminado subsidios; Poutou lucha junto con sus compañeros de fábrica contra el cierre de la planta de Ford en Blanquefort, cerca de Bordeaux. Poutou, junto a esos obreros, vienen de obtener una victoria contra el cierre en 2007-2008, luego de una durísima huelga.
Ellos demostraron que la única solución al desempleo es el reparto de las horas de trabajo entre ocupados y desocupados y el control obrero de las empresas.
¿Libertad, fraternidad, igualdad…?
Francia tiene un sistema de presentación de candidaturas que lejos está de ser democrático. Tiene un mecanismo que obliga a cada candidato a sumar 500 firmas (apoyos) de funcionarios electos (tales como alcaldes, diputados, presidente de región, etc.) para poder presentarse a elecciones. Y este año las reglas se han endurecido, ya que ahora plantean que es requisito publicar en el Boletín Oficial la decisión tomada por cada alcalde, lo que aumenta considerablemente la presión sobre estos. Otra novedad es que los funcionarios elegidos tienen la obligación de enviar ellos mismos al Consejo Constitucional el formulario firmado quince días antes de las elecciones, lo que aumenta la probabilidad de pérdidas (ya anteriormente, un tercio de las promesas no se concretaban). Claramente, estas maniobras no tienen otro objeto que el de impedir que se exprese la voz de los explotados y oprimidos en estas elecciones, en pos de salvaguardar el sistema en el que sólo las cabezas bien integradas pueden alternar.
Esto, sin contar con el apoyo que reciben los grandes candidatos por parte de los medios de comunicación. La distribución de tiempo en los medios atribuido según la “importancia de las candidaturas”, designó a Philippe Poutou la franja de las 2 de la mañana.
En enero se publicó en el diario Le Monde una solicitada firmada por importantes personalidades de la izquierda francesa y mundial en apoyo a la candidatura del trabajador Philippe Poutou. Entre los firmantes se encontraban Nicolás del Caño (ex candidato presidencial por el FIT, Argentina), Olivier Besancenot (ex vocero del NPA), Guillaume Vadot (docente y militante contra la violencia policial) y Emmanuel Barot (filósofo), entre otros.
En la víspera del día internacional de lucha por los derechos de las mujeres
El encuentro con Philippe Poutou ocurre en el marco de una jornada de huelgas interprofesional el día 7, como anticipación al paro del 8 de marzo, en el día internacional de las mujeres, y a dos días del aniversario del comienzo del movimiento contra la ley de trabajo que generó un movimiento enorme de protesta, Nuit Debout, y miles de jóvenes y trabajadores salieron a las calles y paralizaron puertos, trenes, la electricidad, en huelgas históricas para la clase obrera francesa.
Philippe Poutou es una voz que expresa esas luchas, las de todos aquellos que sufren el desempleo masivo, la precariedad, los bajos salarios y la violencia policial. Es la voz del único candidato obrero y tiene que estar. |
