Elisa Carrió rompió con el Frente Amplio UNEN y denunció a todos sus aliados. Fracasada su apuesta a una interna con el PRO, dio el portazo y disparó contra todos.

Si algún mérito tienen los derrapes de Elisa Carrió cada vez que patea el tablero de sus alianzas políticas, es que saca todos los trapitos al sol de lo que hasta ayer ocultaba discretamente.

Como consideró que el documento emitido por la cumbre radical de San Fernando significaba un fracaso de su estrategia de ir a una interna opositora con el PRO de Mauricio Macri, prendió el ventilador y atendió a todos y cada uno de sus aliados.

Carrió es una de las esquirlas más picantes del estallido del partido radical y, como otras figuras, entre las que podría incluirse a Luis Juez en Córdoba, un producto de la “mediatización” de la política luego de la crisis de los partidos tradicionales en lo que se llamó el “neoliberalismo”.

Sus denuncias retumban porque se apoyan en un sentimiento popular que rechaza las castas políticas y los repugnantes negocios de la política burguesa. En el arte del denuncialismo, a veces logra momentos de retórica aguda. Hoy desafió a sus aliados del FAUNEN y les dijo: "Si nosotros, el panradicalismo, no le podemos ganar a Macri, ¿cómo le vamos a ganar al PJ?".

Pero lo que Carrió “destapa” cuando se siente decepcionada es parte de la naturaleza de la política burguesa, determinada por los negocios legales o ilegales. Esas prácticas se siguen desarrollando incluso cuando Carrió está cómoda con sus alianzas y se dedica a “encubrir” a sus socios con el mismo convencimiento que cuando los denuncia. La misma dirigente que hoy se aleja del FAUNEN es parte de la casta que vive de la política, muy alejada de los problemas que sufren las grandes mayorías populares.

Políticamente, tras su discurso republicano, Carrió apuesta a un neomenemismo macrista que vaya aceleradamente a un acuerdo con los buitres, sin ningún tipo de condiciones. Como orgánica del Grupo Clarín pretende que se terminen los roces que este tiene hoy con el Gobierno.

Este nuevo “affaire Carrió” introduce otra crisis en el FAUNEN y revela los problemas que tiene la oposición tradicional para intentar poner en pie una coalición con posibilidades de triunfo.

Es que el giro del Gobierno hacia Scioli como sucesor significa que la "continuidad con cambios" tiene solo matices de diferencia con el "cambio con continuidad". En ese marco las grandes apuestas de los que mandan en el país se van definiendo por Massa, Macri o el mismo Scioli.

Ante esa impotencia, Carrió estalla y dispara denuncias para todos y todas. Y la solución que propone es aliarse a quien hizo de los negocios y la política la esencia de su programa.

Pero no se trata de “denunciar al mundo” de la política burguesa desde el centro mismo de su pudrición. De lo que se trata es de trasnformarlo.

Algunas de las frases más resonantes de Carrió