Un policía acusado, entre otras, de haber abusado de un menor en la comisaría de Banda del Río Salí, quedó en libertad gracias a que un juez rechazó el pedido de detención formulado por la fiscal Adriana Giannoni.
En 2015 una mujer denunció la persecución de los vigías municipales, implementados por el intendente Darío Monteros (Frente para la Victoria), y de policías de la ciudad. Según consta en el expediente, los uniformados le inventaron una causa por la cual la mujer fue detenida junto a sus dos hijos, uno de ellos menor de edad. En la comisaría fueron golpeados y el menor fue abusado. Para ser liberados debieron pagar una coima de $15.000.
Por estos hechos se encuentran detenidos el subcomisario Ángel Alberto Medina, el cabo primero Eduardo González Brondo y el oficial César David Juárez. Están imputados por los delitos de privación ilegítima de la libertad, apremios ilegales y cohecho.
“Custodio de…” y apoyo del intendente
A la hora de declarar, el cuarto policía imputado se presentó como custodio del senador José Alperovich. Acusado de haber sido autor del ataque sexual al menor, fue dejado en libertad por el juez.
Aunque no trascendió el nombre del policía, si se conoció su apodo, “Cobra”. El intendente bandeño le envió un mensaje de apoyo a través de su fan page. “Cobra, estamos con vos!!!”, escribió en mayúsculas, acompañando de fotos de la vigía municipal.
Sobran las especulaciones sobre la relación entre ser parte de la custodia de Alperovich y la libertad del policía. Nuevamente, se pone de manifiesto el mecanismo de impunidad policial amparado en el poder político y judicial. | 
