Este 21 de marzo en el salón KALASASAYA del edificio emblemático de la Universidad Pública de El Alto (UPEA) se llevó a cabo la reunión de presentación, debate y lectura de propuestas de los frentes habilitados de la carrera de Psicología. Durante la reunión se discutió sobre la falta de cumplimiento al punto 22 del reglamento -requisito para la postulación a elecciones de centro de estudiantes- y sobre las molestias que generó la habilitación de un solo frente universitario. De este único frente algunos postulantes fueron anulados debido a que los candidatos de la lista tenían extractos de jubilación en las AFP. Según el comité electoral, a pedido de las bases estudiantiles, solicitaron que se respete el punto 22 de la convocatoria a elecciones aclarando que el pedido de las AFP es para profesionales y no así para empleados, los cuales, podrían participar. Resolviendo así un mal entendido del punto mencionando. De tal manera sé quedo en: “estudiante que tenga cuentas en las AFP y sea profesional no podrá participar”.
La UPEA logró todo lo que tiene con la lucha de los estudiantes, de las juntas vecinales y de los trabajadores de la COR (Central Obrera Regional) de ese tiempo junto a distintos sectores que querían que El Alto tenga su propia universidad. Hoy vemos que en la carrera de Psicología, algunos estudiantes, están empezando a negar ese pasado de lucha y se está convirtiendo en una universidad anti obrera ya que están objetando el derecho a estudiantes que trabajan de que puedan participar en las elecciones universitarias para aportar a la calidad educativa de la UPEA.
Hecha la convocatoria, hecha la trampa
En principio en la convocatoria a elecciones, el comité electoral pidió como requisito los extractos de AFP, donde el punto número 22 de la convocatoria dice: “Presentar reportes de AFP’s (futuro y previsión) originales. Para velar que los nuevos líderes sean estudiantes”. Frente a ello un compañero del frente habilitado dijo: “se presentaron todos los requisitos, presentaron algunos extractos ya que todos los compañeros no son todos trabajadores”. Grande fue la sorpresa cuando el comité electoral ha pedido de las bases estudiantiles esos extractos para anular a los candidatos cumpliendo así el punto 22 de la convocatoria demostrando que ningún estudiante que tenga aportes pueda postularse.
Estas maneras con que las bases estudiantiles actúan son propias de las camarillas docente-estudiantiles que dominan todo el sistema universitario. Son formas de discriminar y alejar a las y los estudiantes de las decisiones democráticas, formas de corrupción ya que su actuar beneficia a una u otra camarilla. Toda decisión que fue tomada en la reunión del 21 de marzo fue parte de otros frentes que no alcanzaron a dejar sus papeles ni los demás requisitos de la convocatoria. Esto generó molestia hacia el comité electoral por no poder ampliar unos días más el plazo para la entrega de documentos.
La mayoría de los estudiantes debemos abrir los ojos ante estos hechos y no dejar que las distintas instancias de dirección de los estudiantes sean botín de estas camarillas. Hoy la UPEA debe recuperar esa alianza entre estudiantes, trabajadores y docentes para garantizar buena educación acorde a las necesidades de la población. | 
