Un crimen realizado contra docentes que intentaban reorganizar al magistrado
El termino de su vida comenzó cuando fueron secuestrado el 29 de marzo, desde las puertas del Colegio Latinoamericano, donde fue torturado en el centro ilegal de detención conocido como “La Firma”, ubicado en la calle 18, y el 30 de marzo sus restos fueron encontrados frente al fundo “El Retiro”, camino a Quilicura, degollado.
La crueldad del crimen, no solo debe ser motivo de que no olvidamos a nuestros colegas que se movilizaban, aun en un contexto de tortura y muerte.
Junto con repudiar esta cruel masacre a los trabajadores de la educación, también debemos rescatar la tradición de lucha de los profesores del movimiento docente en la Asociación Gremial de Educadores de Chile (AGECH), en un momento tan difícil en Chile en plena dictadura militar, donde se desmantelaron la organizaciones de los docentes.
Este homenaje debe servirnos para retomar esa tradición histórica y derribar la herencia que dejo la dictadura militar, y para terminar con la educación de mercado, los despidos y el agobio laboral.
Desde la Agrupación Nuestra Clase encontramos importante que se realicen este tipo de actos , ya que contribuye a la memoria, y de que no los hemos olvidado del crimen contra docentes que se organizaban en las épocas de protestas contra la dictadura militar.
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