Una de las 28 organizaciones adherentes al Partido Revolucionario Institucional (PRI), la Corriente Solidaridad, ha lanzado como propuesta a candidato presidencial al Secretario de Salud, José Narro Robles, Médico Cirujano, viejo político priista y anterior ex Rector de la máxima casa de estudios, la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

A través de un comunicado dirigido a Enrique Ochoa Reza, presidente del PRI emitido por la Corriente Solidaridad que encabeza Armando Barajas Ruiz, miembro del Consejo Político nacional priista, es propuesto como candidato del partido para los comicios del 2018.

De acuerdo al escrito, lo que convence para candidato es ser “distinguido militante del partido, tiene un margen aceptable y prestigio en la sociedad”, es decir, tener status social en el gremio como médico y director del Sector Salud en dos etapas distintas y sobre todo por su participación política como Rector de la UNAM, aunque recordamos que también ha dado grandes traspiés en estas instancias como el reciente escándalo de medicinas caducadas y vacunas falsas o sus pasos tendientes hacia privatización, previa precarización, de la misma Universidad.

La Corriente Solidaridad se dice que cuenta con 15 mil militantes priistas de todo el país, y que supuestamente está debidamente registrada en el INE. En voz de su líder Armando Barajas, el apoyo para el ex rector de la UNAM es porque es u hombre honorable que no ha sido señalado en su ética y moral. Pero desde su actual cargo como Secretario de Salud desde el 2016, se ha visto toda trama de corrupción que lo persigue, desde hasta los sueros y tratamientos para pacientes con VIH, aún más la carencia de servicios a mujeres en labor de parto.

Lo que hay que destacar que en el PRI ya irrumpieron definitivamente las acciones rumbo al proceso electoral del 2018 y en ese sentido el lanzamiento de la candidatura de José Narro se da por la preocupación en las filas del priismo respecto a la credibilidad de quienes se venían considerando como candidatos más viables, desde el considerado favorito de Peña Nieto, Luis de Videgaray, el reemplazo de éste en caso de alguna recaída política, como fue el affaire del viaje de Trump a México, Enrique Ochoa Reza y el secretario de Gobernación, Osorio Chong que está labrando su imagen como defensor del Ejército y su legitimación constitucional.

Todos estos están marcados por la crisis de credibilidad del régimen por lo que el nombre de José Narro se viene mencionando últimamente entre las filas del tricolor como una opción políticamente menos desgastada.