Comenzando la quinta semana de paro, docentes de la primaria N°26 y la secundaria N°90 organizaron una actividad en la que se juntaron a debatir y repartieron volantes a padres y docentes frente a la escuela, y a peatones y automovilistas en la calle aledaña. El objetivo era acercar a la comunidad los motivos de su pelea en defensa de la escuela pública.
Finalizada la actividad Natalia – profesora de ambas escuelas – se quedó pegando un último afiche. En ese momento un hombre acompañado por un Ovejero Alemán se acerca a ella y comienza a increparla. Así contó los hechos ocurridos a la LaIzquierdaDiario: “Se acerca este señor a preguntarme porqué pegaba afiches en la reja de una escuela pública. Le comenté que era docente de la escuela y ahí comenzó a decirme que los responsables de la situación de la escuela pública éramos nosotros, porque faltábamos siempre y no le enseñábamos nada a los pibes. Luego comenzó a cuestionar mi vestimenta diciendo que yo estaba más para ir a bailar o para una feria hippie que para dar clases. Y que tenía que tomar el ejemplo de Japón o Finlandia donde había mayor disciplina”.
Luego Natalia comentó que este señor sostuvo todo el tiempo su teléfono en alto, como grabando la conversación: “Yo le dije que si quería grabar la conversación me tenía que pedir permiso, el lo negaba mientras seguía tratándonos de vagos y culpándonos de todo. Acto seguido lo invité a pasar a la escuela para mostrarle el agujero que tenemos en el pasillo de primer ciclo, un pedazo que se cayó y nunca arreglaron, diciéndole que nosotros no peleábamos sólo por salario sino que defendíamos también las condiciones de la escuela. Pero jamás tuvo intención de escucharme”.
Ante la pregunta de cómo se sintió en esa situación, la docente respondió: “Me sentí sola, hasta que salió una maestra integradora que me ayudó. Me sentí muy expuesta. Le pregunté porqué esperó a que esté sola, y me esquivó diciendo que había pasado antes y no nos había visto. Sentí miedo. Porque este señor con su perro hablaba muy enfurecido. La furia se notaba en sus ojos y me intimidaba. Además seguía con su celular en mano, y al finalizar reconoció ser periodista y estar en comunicación directa con una locutora de una radio que ahora no recuerdo el nombre. Me sentí muy sola, desprotegida. Nunca quiso entrar a la escuela para hablar”
No es casualidad que estos hechos se den luego de los violentos discursos de Macri y Vidal contra los trabajadores que defienden sus derechos, acusándolos de mafiosos y de dañar la educación pública. Tampoco es casualidad que sea luego de una marcha en la que un sector minoritario y acomodado de la sociedad mostrara sus pelos y su desprecio por los sectores obreros y populares, envalentonando lo más reaccionario de la cúpula de Cambiemos.
Pero pese a los aprietes y amenazas la pelea de los docentes continúa. Luego de esta entrevista Natalia se juntó con sus compañeros en la asamblea del Suteba La Matanza para definir la continuidad del plan de lucha. Y desde ahí se irán a Capital para participar de la marcha de antorchas contra la impunidad del asesinato de Carlos Fuentealba. Pues el fue fusilado por, como ella, defender la escuela pública. |