Este martes, y luego de haber dividido la reforma a la educación superior en dos proyectos, uno para universidades estatales y otro para privadas, el gobierno ingresó con suma urgencia a la Comisión de Educación de la Cámara de Diputados, el proyecto que regula a las universidades estatales; sin todavía conocerse las indicaciones que tiene al proyecto, como una manera de amarrar su trámite legislativo durante este año.
Una Reforma estructuralmente neoliberal
Para la vicepresidenta de la Fech, Bárbara Brito, la reforma mantiene el mercado educativo: “Sin conocerse las indicaciones al proyecto y con una gratuidad por glosa presupuestaria que le garantiza a los privados seguir controlando el 80% de nuestra educación al limitar la matrícula de los planteles estatales, estamos por rechazar la reforma”. En opinión de Brito, “el discurso de fortalecer la educación pública del gobierno es una total farsa cuando vemos estas cifras”.
Es por esto que interpeló directamente a los parlamentarios que anteriormente fueron dirigentes estudiantiles: “Esperamos que no se repita lo ocurrido con los profesores cuando los diputados Vallejo y Jackson votaron una ley que habían rechazado más del 97% de los docentes. El movimiento estudiantil rechaza de manera contundente esta reforma y esperamos que los diputados voten en contra de legislar”, aseguró.
La dirigente estudiantil también criticó el fondo de la propuesta del gobierno: “La reforma continúa con la lógica del Estado subsidiario que consagró la Dictadura. No puede ser que los estudiantes tengamos que seguir acreditando si somos pobres o no para recibir la gratuidad cuando esta debería ser un derecho”, denunció.
Crítica a los rectores
Desde inicios de marzo, el gobierno inició una ronda de negociación con los rectores del Cruch que se habían dividido defendiendo los intereses de cada una de las universidades. Fue así que la ministra Del Piano logró destrabar la reforma al separarla en dos.
Para la dirigente estudiantil los rectores tuvieron un doble discurso: “(Los rectores) se negaron hasta que se les aseguraron sus propios intereses y ahora apoyan al gobierno”.
Brito señaló que la reforma consagra el autoritarismo en los planteles educativos.: “El marco que plantea la reforma continúa el modelo autoritario donde son los rectores los que toman las decisiones dejando de lado al resto de las comunidades.”
“Incluso se niega el derecho a la participación de los trabajadores y los estudiantes en los consejos superiores y se aseguran 2/3 de los votos para los profesores de planta en los consejos académicos. No hay democracia universitaria posible con esos porcentajes”.
"Por eso como militante de Vencer no comparto la idea de que los rectores pueden ser aliados del movimiento estudiantil, idea que defienden incluso corrientes de izquierda. La unidad necesaria es con funcionarias y trabajadores, y con las y los profesores", afirmó Brito.
“Los estudiantes debemos irrumpir nuevamente”
El pasado sábado, la Confech sesionó en la Universidad de Talca, donde los estudiantes definieron su estrategia para enfrentar el escenario político del año y preparar la primera marcha del año que se realizará el próximo martes 11 de abril.
La dirigente estudiantil señaló que “mientras los dirigentes mayoritarios del Confech restringen su actuar a lo posible, incidir en la reforma, nosotros planteamos que los estudiantes debemos irrumpir nuevamente en el escenario nacional. La Confech (donde tienen la hegemonía los estudiantes del Frente Amplio) debe dejar de actuar de manera testimonial presionando a un parlamento y un gobierno que legisla para los empresarios, y ponerse a la altura de los desafíos que tenemos como movimiento estudiantil en la lucha por la educación gratuita para todos y todas. Hoy, debemos salir juntos a rechazar claramente esta reforma, más fuerte que nunca”, aseveró la Vicepresidenta FECH.
Para ello, la dirigente señala que “la marcha del martes 11 de abril será la primera marcha estudiantil del año. Debemos realizar asambleas en todas las carreras, facultades y universidades, para rechazar la reforma y que el 11 sea un gran paro y movilización nacional, y avanzar a preparar desde las bases un plan de lucha y un programa que condense las aspiraciones que venimos planteando como la educación gratuita 100% financiada por el estado, laica y no sexista; el cogobierno triestamental, la estatización de toda universidad que quiebre, lucre o donde sus comunidades así lo decidan como hoy es la crisis de ARCIS, y unificarnos con otros sectores como el movimiento NO+AFP, trabajadores y mujeres”.
Bárbara Brito finaliza invitando a las asambleas y a una gran movilización: “En el campus Juan Gómez Millas realizaremos una masiva asamblea estudiantil este jueves, para preparar desde la base un potente movimiento estudiantil que le pueda hacer frente al gobierno e imponer todas nuestras demandas". | 
