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Según un nuevo dictamen de la fiscal general Gabriela Boquin, Correo Argentino está financiando gastos de Sideco y otras compañías de la familia Macri.
La empresa está en concurso de acreedores desde hace 16 años. Por este motivo sus movimientos son controlados por la Justicia Comercial. Para mover sus activos, requiere autorización judicial y una justificación.
Según su último dictamen, Boquín detectó que durante 2016 los responsables del Correo migraron parte de sus fondos hacia una empresa del grupo Macri, Sideco Americana SA, a través del pago de alquileres “exorbitantes”.
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Algunos datos son más que elocuentes. Correo Argentino tiene tres empleados y cinco directores. A pesar de su escaso personal, le firma alquila cuatro oficinas en uno de los barrios más caros de Buenos Aires.
Aunque no presenta actividad comercial actual, en 2016 logró una autorización judicial para retirar $ 1,6 millones y US$ 185.213 de sus cuentas congeladas para destinarlos a supuestos gastos de funcionamiento, tales como un contrato de alquiler de oficinas. También adujo pagos de cargas sociales para gerentes de otras firmas del Grupo Macri y una fiesta de fin de año para sus pocos empleados.
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Sideco y Correo firmaron en 2012 un contrato de locación por US$ 18.000 mensuales más IVA. Las oficinas alquiladas se ubican en el mismo edificio donde funciona Sideco, Socma Americana, Chery Socma y MacAir. En 2016, con Macri en el Gobierno, lograron la autorización de la jueza Marta Cirulli, para retirar los fondos. Además de estos alquileres, Correo le paga al grupo Macri cerca de $ 113.000 mensuales por “gastos contables e informáticos” y otros $ 40.000 pesos mensuales en gastos de cocheras.
En marzo Correo pidió retirar otros $ 422.973 y US$ 12.290 pero en ese entonces, la causa estaba en la mira por las irregularidades en la negociación de la empresa y el Gobierno de Macri. La jueza Cirulli no autorizó los movimientos y Correo Argentino apeló su decisión, con el argumento de que un año antes la magistrada había determinado lo contrario. Al apelar, el incidente llegó a la fiscal de Cámara. | 
