FOTO: Linterna en mano y rodeado de un puñado de militantes, el Presidente de la FULP intentaba leer las mociones para luego votarlas
En el día de ayer la FULP dirigida por el kirchnerismo y el PJ, realizó una asamblea Interfacultades convocada por un flyer a través de Facebook, a la que todo el movimiento estudiantil fue totalmente ajena. Si a veces se puede decir que la convocatoria es escasa, en esta ocasión no existió convocatoria: fue sólo agrupaciones que ya se conocen todos entre sí, discutiendo durante más de tres horas.
La falta de participación no hay que buscarla en el desinterés estudiantil, sino en la nula convocatoria que hizo la conducción de la FULP. A un año y medio de la asunción de Macri al gobierno, los estudiantes han sufrido gravemente las consecuencias del ajuste: quienes no han tenido que abandonar sus estudios, han visto notablemente mermada las condiciones en que los llevan adelante. El transporte, el alquiler, los servicios, las fotocopias, todo es más caro mientras los CEO’s amigos del poder son beneficiados a decretazo limpio.
En las aulas y pasillos de las facultades no hay duda que la bronca contra el macrismo es enorme y generalizada, pero a su vez un sector importante de los estudiantes comienza a ver que la avanzada del gobierno no podría completarse sin la inestimable ayuda de la mal llamada “oposición” (FPV, FR, PJ, etcétera), que le ha votado en el Congreso más de 83 leyes. En los canales de TV se sacan chispas pero en el Congreso todos levantan la mano, toda una coalición de ajuste contra los trabajadores y los estudiantes.
Así los estudiantes nos encontramos ante el problema: ¿Cómo enfrentamos a esta coalición de ajuste?
Suena irrisorio decir que el objetivo de la asamblea era la defensa de la educación pública cuando la mayoría de los estudiantes ni siquiera estaba enterada de esta asamblea. El kirchnerismo universitario hizo una asamblea para decirse asi mismos todo lo que viene haciendo cuando en lo que en el año no convoco una sola marcha en la UNLP, ni hablar de un plan de lucha a la vista. Ayer se llegó a un punto de no retorno. Si queremos terminar con la deserción en las aulas y el ajuste a la educación pública este definitivamente no es el camino.
Paréntesis. Merece nuestra mencion y repudio total la escandalosa negativa de la FULP a la propuesta que hizo la izquierda de un pronunciamiento en repudio de la represión a los docentes, estatales y jubilados de Santa Cruz semanas atrás. Para La Cámpora y compañía hay represiones a las cuales repudiar y represiones a las que no.
Hay miles de peleas por dar (paritarias, boleto educativo, presupuesto), pero todas se resumen en una: la defensa de la educación pública. Frente a toda la coalición ajustadora nosotros gritamos que nuestra educación vale más que sus ganancias. En La Plata, la Federación y las conducciones de centros de estudiantes han resultado un escollo para el grueso de los estudiantes que desean enfrentar el ajuste. Si queremos realmente darle un golpe al macrismo y a toda la coalición de ajustadores, hay que superar a esas conducciones que ya mostraron por demás sus límites y recuperar la Federación para ponerla al servicio de la lucha.
Pero para tomar este camino no hay soluciones mágicas, hay que dar los primeros pasos para organizarse en cada una de las facultades. Semanas atrás en Humanidades y en Bellas Artes se hicieron asambleas y clases públicas, pero un sector del movimiento estudiantil plantea que solo con esto no alcanza para enfrentar las políticas de ajuste del gobierno, que la bronca es profunda y las respuestas por parte de las conducciones son insuficientes.
Desde las distintas agrupaciones que estamos poniendo en pie la Juventud del PTS con estudiantes independientes creemos que este primer paso de autoorganización es sencillo, y es el opuesto por el vértice a la orientación que se plantea la FULP. ¿En qué cursada de qué facultad no hay bronca por el ajuste? Frente a eso, proponemos lanzar cuerpos de delegados en todas las facultades. ¿En qué consiste esto? Consiste en que compañeros y compañeras estudiantes puedan discutir en sus cursadas las problemáticas que crean importantes, para llevar puntos de discusión a las asambleas, y que posteriormente las resoluciones de las asambleas sean llevadas de vuelta a las aulas por esos mismos delegados. Así no quedará estudiante en la facultad ajeno a estos espacios.
Como planteamos ayer en la asamblea, es fundamental una agenda de lucha, con clases públicas cortando 7 y 50, para así volver el paro de la próxima semana –del 8 a 12 de mayo- en un paro estudiantil activo junto a los docentes. Es la organización del movimiento estudiantil desde cada facultad de la UNLP la que va a lograr enfrentar el ajuste que Macri viene llevando adelante en la educación pública, que replican las autoridades de la UNLP y que la conducción de la FULP elije no enfrentar. |