El miércoles por la tarde jugaron Nueva Chicago y Ferro por la fecha 32 de la B Nacional.
Antes del comienzo del partido, en la tradicional foto que se sacan los equipos, el torito desplegó una bandera con un mensaje en repudio al escandaloso y nefasto fallo de la Corte Suprema, para beneficiar a los genocidas de la última dictadura militar con el 2×1.El “trapo” decía “No al 2x1, cárcel común para los genocidas, ni olvido ni perdón” y abajo la firma “Los pibes de Chicago”. El hecho se dio horas antes de la multitudinaria marcha en Plaza de Mayo. Así Chicago se sumó a otros equipos que también mostraron su repudio al fallo.
Que el fútbol siendo el deporte más popular y la pasión de millones de trabajadores haya tenido ese gesto, es producto también de una sociedad que dice “No perdonamos, no olvidamos, no nos reconciliamos”.
Las tribunas fueron una parte más de la masiva marcha: al igual que en la Plaza se gritó en contra de la impunidad y la reconciliación.El fútbol como expresión de la sociedad siempre se ha pronunciado ante hechos de abuso por parte del Estado en todas partes del mundo.
El Estado y sus socios políticos disfrazados de “oposición” intentan instalar un mensaje de paz social con las fuerzas armadas: Milani como jefe del ejército durante el kirchnerismo, el 2x1 y las constantes declaraciones de los funcionarios macristas son parte de un mismo entramado, un mismo objetivo.
La masividad de la marcha y las banderas en los estadios no solo muestran que la sociedad está en contra del fallo, sino también que rechaza la paz social con las fuerzas armadas, que tiene memoria y no olvida que fueron 30.000;que lucha para no ver a ningún genocida libre en la calle, lucha para que Julio López aparezca con vida. La impunidad se derrota en las calles, con memoria verdad y justicia. | 
