El editorial de la Diaria
Desde el editorial se plantea que ante la crisis de la educación se “requiere, con urgencia, importantes esfuerzos del conjunto de la sociedad” y que la Universidad “necesita de la FEUU en el marco de su cogobierno”.
Ante el planteo de no participar en el Congreso se expresa además que “no parece muy conducente que, ante el hecho de que no se adecuan a sus deseos, (la Feuu) sostenga que lo mejor sería que ninguna organización popular se haga presente en ellos para defender sus posiciones”.
Si la FEUU plantea que la convocatoria a este congreso cuando se está discutiendo la Rendición de Cuentas este año es una jugada política del gobierno, la nota editorial intenta relativizar esta posición diciendo que “esto también es difícil de comprender, porque el Parlamento vota rendiciones de cuentas todos los años, y la movilización por el 6% no es algo específico de 2017”.
Como cierre el editorial expresa que “conquistas como las de la autonomía y el cogobierno” se lograron históricamente por participar de espacios como los del Congreso de Educación
Argumentos falaces
Detrás de este punto de vista que se desarrolla desde el editorial subyace una visión de que los movimientos sociales (en este caso el movimiento estudiantil) deben ante todo institucionalizarse y pasar a ser prácticamente figuras decorativas. Aún con la clara constatación de que se desconocieron las resoluciones que surgieron de los congresos anteriores (que el FA se había comprometido a impulsar) la línea editorial insiste en “discutir desde adentro” instando a no dejar esos espacios como si simplemente se tratara de una cuestión de intolerancia.
Argumentos de este tipo se convierten por la vía de los hechos en una defensa de la política educativa del Frente Amplio y un ataque a la independencia política de la FEUU.
Porque en concreto es exigir su participación en una instancia que termina siendo un “como si”, con un valor casi testimonial, en la que el Frente Amplio quiere mostrarse como gobernando de acuerdo a los intereses populares. Una ilusión que tres periodos de gobierno se han encargado de desmentir y que la declaración de la FEUU intenta señalar al denunciar el carácter decorativo de instancias como este Congreso.
La resolución que emite la Federación de estudiantes es producto de la experiencia de estos años y del desengaño ante la falta de cumplimiento por parte del FA de lo discutido en los congresos de 2006 y 2013 sumados a haber sufrido la esencialidad de 2015 y la represión en el Codicen.
No es verdad por otra parte que la autonomía y el cogobierno se lograron en base a la negociación o a haber participado en instancias con otros actores; al contrario, seguramente de esa manera no se habría conseguido ningún reclamo.
Solo la organización y la masiva movilización en años de lucha obrero-estudiantil permitieron alcanzar la autonomía y el cogobierno.
Por otra parte; ¿Acaso se ha cumplido la promesa del 6% para la educación? La experiencia de estos años muestra como el gobierno ha concedido algunas mejoras cuando ve que el reclamo se sostiene con estudiantes en las calles luchando por sus derechos.
De otra manera solo se intenta canalizar el descontento en ámbitos que el propio gobierno ha vaciado de contenido al no dar cumplimiento a las resoluciones a las que se llegaron. Resoluciones que son producto de una discusión democrática entre aquellos a los que verdaderamente les interesa una educación pública de calidad y sin la presencia de empresarios que ven a la educación como un negocio y una oportunidad para lucrar. | 
