Edgardo Videla
| Delegado Comisión Interna de Cuyoplacas | Mendoza
Seguimos el repaso por “Sgt. Pepper’s Lonely Hearts Club Band”. Luego de publicar cómo nacieron, ver la portada y el concepto del álbum, comenzamos con la historia de sus geniales canciones.
Para hablar de las canciones de Sgt Pepper, debemos tomar como piedra fundamental a los temas “Strawberry Fields Forever” y “Penny Lane”, que fue el concepto que luego se trasladó a los orígenes del álbum.
Los Beatles habían comenzado a pensar en un álbum inspirado por su infancia en Liverpool, y esos temas darían comienzo al mismo, el primero, de Lennon, hablaba del parque de un orfanato, y el segundo, de McCartney, era una postal de una de las calles de su ciudad natal.
Por razones de contrato ambos temas, debieron ser lanzados como simple el 17 de febrero de 1967. Con lo que la idea del álbum sobre su infancia se diluyó, pero al proponer McCartney el proyecto del alter ego,la idea de lo conceptual se mantuvo viva, al menos en el inicio.
Obertura con Pimienta
La canción Sgt. Pepper’s Lonely Hearts Club Band, es una especie de invitación a disfrutar de una presentación de la Banda del Sargento, con halagos a la audiencia, ambientados en un sonido de vientos que combina lo militar con lo circense. El tema es de Paul, y la primera toma se realizó el 1 de febrero de 1967, en los estudios de EMI en Abbey Road, y según George Martin, el productor, fue como si el Sargento tomara vida. El ingeniero de sonido fue Geoff Emmerick, que grababa su segundo álbum con Los Beatles.
Cada uno de Los Beatles ejecuta su función dentro del tema, Lennon, guitarra y coros, Harrison guitarra y coros, (aunque algunos citan que McCartney, fue quien ejecutó la guitarra líder, porque no estaba conforme con el sonido que George aportaba al tema), Ringo en batería y coros, y Paul en bajo y voz principal.
Desde el primer acorde, el sonido se diferencia mucho de lo que la banda venía realizando, acordes más contundentes producto de guitarras más estridentes, con fraseos punzantes entre los acordes, y el sonido del nuevo bajo Rickembaker 4001, de Paul que llena de contundencia el inicio de la canción, que en un momento. Entre sonidos de aplausos, da paso a una orquesta de vientos a cargo de músicos de sesión, y que proporciona una atmosfera de inicio de función, para retomar luego el sonido del comienzo con las guitarras estridentes, avanzando hacia el final con la grandilocuente presentación del cantante Billy Shears, ante una ovación.
El tema quedó terminado, después de tres sesiones más, y luego de que a Los Beatles se les ocurriera revisar el depósito de grabaciones de sonidos de EMI, buscando sonidos para agregar a Good Morning, Good Morning, otro tema del álbum, cuando encontraron las cintas de sonidos del público, e inmediatamente decidieron agregarlos al tema del Sargento terminado. Solo con este propósito los cuatro Beatles, pasaron tres horas revisando cintas hasta encontrar una que les gustó por las ovaciones del público, pensando en la presentación de Billy Shears.
Casualmente era una grabación de “The Goon Show”, (una comedia radial que hizo famoso a Peter Sellers), que había realizado George Martin para EMI en 1960. Con esta idea de agregar sonidos de público, agregaron el sonido de la orquesta de 41 músicos que participó en A Day in the Life, otro tema del álbum, y que grabaron mientras afinaban sus instrumentos en la sesión del 10 de febrero de 1967, Consideraron que el tema ya no necesitaba más retoques el 6 de marzo de 1967, algo más de un mes luego de iniciar la grabación.
McCartney el creador del Sargento
Para Paul McCartney uno de los honores más grandes de su carrera fue que a tres días de haber salido el álbum, Jimi Hendrix se presentó en Londres, y abrió el show con Sgt. Pepper’s Lonely Hearts Club Band, Paul estaba entre el público.
Billy es Ringo
Mientras se ahoga el griterío que cierra el primer tema, y que supone una ovación para el cantante Billy Shears, que no es otro que Ringo Starr, comienzan a sonar los acordes de “With a Little Help from my Friends”, el tema que Lennon y McCartney habían escrito para el baterista.
El tema comenzó a tomar forma en Kenwood la casa de Lennon, en marzo de 1967, con él y Paul muy consustanciados en realizar una letra más madura de las que habitualmente componían para Ringo. El uso del verso “I get high”, (Me elevo), tiene una connotación intencional por el consumo de marihuana. La canción se planteó como un dialogo entre Billy/Ringo y el público, representado en los coros de los otros Beatles, que alternan preguntas y respuestas, y jugando, con una sutil astucia, con la idea de que Ringo, musicalmente, necesitaba la ayuda de sus amigos.
La música terminó de definirla Paul en su casa, y en el disco suena como una agradable melodía que avanza sobre una sólida y pulida base de bajo y batería, a la que se agregan un piano a cargo de Paul, Lennon en coros y cencerro, Harrison en guitarra. Ringo, además de la batería, y su voz, sumó una pandereta, y George Martin el órgano Hammond.
Si bien es, probablemente el mejor tema que Paul y John escribieron para Ringo, cabe remarcar que, posiblemente, también sea la mejor interpretación del baterista, que con mucho apoyo por parte de sus compañeros, fue tomando confianza para llegar a la nota final, que lo ponía inseguro. La última nota de la canción es el registro más alto grabado por Starr. El mismo día que el tema quedó terminado, Los Beatles realizaron la sesión de fotos para la portada del álbum, el 30 de marzo de 1967.
Joe Cocker
Hay muchas versiones de este tema, pero la primera y muy buena, la lanzó Joe Cocker en octubre de 1968, que al contrario del rasgo intimista y personal que Lennon y McCartney le imprimieron al tema, pensó en la letra como una celebración del espíritu de los comunitarios 60s, amor, paz, y marihuana.
Denny Cordell, quien arreglaba los temas en la banda de Cocker, no solo pidió todas las autorizaciones correspondientes, sino que pidió reunirse con los cuatro Beatles en Apple para tocar personalmente la versión a sus autores. Cuando lo consiguió, todos quedaron maravillados, y aprobaron el lanzamiento del tema, que fue grabado con la participación de Jimmy Page, en guitarra, y se convirtió en una especie de himno de los grandes festivales que comenzaban a florecer en USA.
Lucy, la amiga de Julian
Lucy O’Donnel, quien falleció víctima del lupus en 2009 en Inglaterra, fue la inocente inspiradora del tercer tema del Sgt. Pepper, cuando tenía cuatro años, y se sentaba junto a Julian Lennon, hijo de John, en el Heath House School, una guardería privada de Weybridge.
Mientras John y Paul, tomaban el té en Kenwood, a principios de 1967, Julian se les acercó para mostrarle un dibujo, que consistía en una niña flotando en el cielo, con estrellas dibujadas cruzando dos triángulos, por lo que se asemejaban a diamantes. En un costado, el niño había escrito, “Lucy in the Sky with Diamonds”, asegurando que era su compañera Lucy.
Los dos músicos que estaban por subir a componer, vieron algo parecido a un viaje de ácido en el dibujo y decidieron trabajar en base al mismo. Lennon, un fanático de Lewis Carrol, recordó un verso de “Lana y Agua”, de Alicia a través del Espejo: “Un bote, bajo un cielo soleado, avanza soñoliento en un anochecer de julio…”.
La llegada del ácido y la psicodelia, justificaba todas estas imágenes surrealistas, e impulsaba a John, sobre todo a encontrar las propias. “Ojos de kaleidoscopio”, “Cielos de mermelada”, “Flores de celofán amarillas y verdes”, “Taxis de papel de periódico”, ambos se sentían como escribiendo una nueva versión de Alicia en el País de las Maravillas.
El tema entró al estudio el 1 de marzo de 1967. George Martín, dicen algunos biógrafos, se derritió en admiración hacia Lennon, cuando escuchó la letra de la canción. De hecho Martin, toca el órgano Hammond en el tema, Harrison aporta el sonido de la India, con una tampura, y también toca la guitarra, Ringo suma la percusión y maracas, Lennon es la voz principal, y toca guitarra acústica, mientras Paul, toca el bajo, que resalta hacia el final de la canción, y un órgano Lowrey, que Lennon junto a Martín, retocaron en el estudio para darle un sonido más “cavernoso”.
El primer día, grabaron las pistas de fondo. El segundo, los arreglos instrumentales y las voces, y el tercer día se dedicaron a mezclar los grabado, con lo que el tema quedó terminado el 3 de marzo de 1967, convirtiéndose en el tema que más velozmente se concluyó.
Lo curioso es que durante todo el proceso, un detalle que pasó inadvertido para todos, no se les escapó a los fans y a la prensa, mucho menos a la censura, las iniciales de Lucy in the Sky with Diamons, coincidían con las siglas, LSD, lo que provocó que se prohibiera su difusión en varios países. Sin duda la canción puede interpretarse claramente como una oda al ácido, pero en ningún momento se pensó en eso en forma consciente. El LSD, era parte de la cultura popular de la época, y si bien, McCartney reconoce que el tema habla sobre una alucinación, nunca pretendieron que la canción lleva un mensaje oculto. Con la censura, en la jerga callejera, comenzó a llamarse Lucy, a las tabletas de LSD.
Lucy ODonnel
Seguiremos conociendo el resto de las canciones en próximas entregas.