Fotografía: MTS/Diana Valdez
El Sindicato Nacional de Trabajadores de la Caja de Ahorro de Telefonistas (SNCAT) ha sido la piedra en el zapato para Francisco Hernández Juárez, dirigente del Sindicato de Telefonistas de la República Mexicana (STRM), el cual funge directamente como patrón.
Frente a la situación nacional y en vista de la ofensiva patronal que violenta los derechos de las trabajadoras y los trabajadores de todo el país, el SNCAT se pronunció por la unidad de las luchas, en solidaridad con los 43 normalistas desaparecidos de Ayotzinapa, con la lucha del Instituto Politécnico Nacional (IPN), por la liberación de las y los presos políticos de las movilizaciones por Ayotzinapa y contra las reformas estructurales que este gobierno ha impuesto.
Las trabajadoras y los trabajadores de la Caja de Ahorro cuestionan las condiciones laborales que sufren, así como una serie de irregularidades. Desde los exorbitantes sueldos de los altos funcionarios donde por supuesto, familiares de Hernández Juárez tienen puestos, hasta los intentos de afectar las condiciones de su Contrato Colectivo de Trabajo.
A estos atropellos, se ha respondido con la denuncia, dando a conocer el lucro que se hace con el dinero de los trabajadores telefonistas y el acoso laboral por parte de la patronal. Con mítines y paros laborales han salido a defender sus derechos. También se han acercado a otros sindicatos como el Sindicato Mexicano de Electricistas y la Nueva Central de Trabajadores.
La burocracia “juarista” se pinta de “opositora al régimen” y como una dirección democrática en la central sindical Unión Nacional de Trabajadores (UNT). Sin embargo, frente a los paros y las denuncias de los trabajadores responde como la misma patronal, con sanciones y despidos injustificados.
El SNTCAT no se ha doblegado y ahora la burocracia sindical patoteril, más conocida como ‘charrismo’, responde con la creación de un sindicato afín a la burocracia ‘juarista’, afiliando a trabajadores a base de amenazas y supuestos beneficios. Ahora este nuevo sindicato ha obtenido el registro nacional, por lo que la próxima jugada de esta dirigencia será tratar de arrebatar el Contrato Colectivo de Trabajo al SNTCAT.
Los trabajadores le plantan cara a la burocracia y han decidido en este congreso desplegar campañas por la reinstalación de las trabajadoras y los trabajadores despedidos, y por la futura pelea por el CCT en todos sus centros de trabajo.
La solidaridad entre las luchas que hoy atraviesan México en medio de la crisis política nacional, representa una herramienta de fuerza para el conjunto de las y los trabajadores en el país. El movimiento democrático que hoy despierta se da cuenta de que el trasfondo del caso Ayotzinapa son las condiciones de miseria en las que viven las mayorías mexicanas. | 
