Las movilizaciones de este domingo se dan en el marco de un gobierno debilitado desde que tomó la Casa Blanca y que los últimos días empeora debido a las críticas por su distanciamiento con Cuba, la vuelta al tema del muro en la frontera con México y la supuesta intervención rusa en las elecciones presidenciales conocidas como el Rusia Gate.
La jornada contra Trump tuvo lugar en al menos 46 ciudades siendo Los Ángeles, San Diego y Oregón los lugares en donde se concentró el mayor número de manifestantes. En Los Ángeles se contabilizaron alrededor de 10 mil personas. En otros estados y capitales el número de personas fue mucho menor como en Nueva York y Washington D.C.
“Está destruyendo al país” “Me molesta a diario” “Esa forma de hablar de las mujeres me parece ridículo” mencionó Judy Silberman, que se refirió a los tweets de Trump sobre la co- protagonista del programa MSNBC Mika Mrzezinski la semana pasada donde el mandatario arremetió contra ella.
Tudor Popescu, uno de los organizadores, dijo que la ley de extranjeros y la obstrucción de la justicia, son suficientes argumentos para que el congreso abra la investigación y el proceso de destitución.
Los manifestantes también utilizaron el momento para denunciar los grandes negocios que el mandatario tiene en el extranjero y para alzar la voz en contra de las medidas xenófobas que impulsa desde su campaña presidencial.
En algunos puntos salieron pequeños sectores a tratar de defender al mandatario, llegando a algunos enfrentamientos leves donde tuvo que intervenir la policía, quien escoltaba a los contra marchistas.
Mike Tokes, uno de los organizadores de las contra marchas, dijo que “nuestra presencia es para contrarrestar las medidas de la izquierda liberal” llamando a apoyar al presidente en las calles o por redes sociales.
La administración Trump está golpeada desde su campaña presidencial por sus propias propuestas xenófobas y reaccionarias. Pero mientras tiene cada vez menos apoyo popular (sólo 37% de la población aprueba sugestión), tanto el partido republicano –por el que llegó al poder- como el demócrata directa e indirectamente lo sostienen.
Hoy las movilizaciones y los cientos de estadounidenses que dicen no a las políticas de Trump, demuestran la debilidad de su gobierno y la falta de margen para poder garantizar la estabilidad económica en medio de una crisis mundial que ya lleva 9 años. |