12 nuevas víctimas han presentado denuncia por abusos sexuales en Rotherham tras el escándalo del pasado 26 de agosto cuando se conoció que 1.400 menores sufrieron explotación sexual y trata durante una década.
El pasado martes 2, el Ministerio del Interior pidió dimisiones y una investigación independiente del ayuntamiento de Rotherham. El partido Laborista suspendió a cuatro de sus concejales en Rotherham: Roger Stone (presidente), Jahangir Akhtar (vicepresidente), Ann Russell y Shaukat Ali.
David Crompton, jefe de la policía de South Yorkshire, asegura que no va a dimitir. Crompton alega que asumió su cargo en 2012 mientras que la mayoría de los abusos que cubre el informe se sucedieron entre 1997 y 2013. Crompton ha anunciado el encargo de una investigación independiente para estudiar el papel de la policía y del ayuntamiento. Y también se ha comprometido a explicar por qué los oficiales de South Yorkshire arrestaron a una víctima de 11 años en lugar de a sus violadores, o por qué un oficial calificó de “enteramente consensual” la violación de una niña de 12 años por varios hombres, según informa The Guardian.
Shaun Wright, comisario de Asuntos de Delincuencia de Yorkshire, afirma que tampoco va a dimitir porque los errores no conciernen a “una persona o una organización”, en declaraciones recogidas por la agencia Europa Press. Wright, que fue miembro del consejo de Rotherham con la responsabilidad sobre el servicio a los menores entre 2005 y 2010, anunció que no se presentará a la reelección en 2016.
Crece la islamofobia y la ultraderecha aparece en escena
Decenas de personas llenaron el consejo de Rotherham el miércoles 3 para exigir respuestas por la inacción de los poderes públicos. Una mujer fue aplaudida tras atestiguar: “Estamos muy enfadados y no sabemos por qué todos ustedes no han renunciado.”, según informa el portal de noticias News.sky.com. Pocos día más tarde, ha presentado su dimisión Martin Kimber, director ejecutivo del consejo de Rotherham.
Miembros de la Liga Inglesa de Defensa (EDL) acamparon en la calle principal de Rotherham –frente a la central de policía y del ayuntamiento– y, afirman que van a quedarse hasta que dimita los responsables de la policía de South Yorkshire y el comisionado Shaun Wright.
También se acercaron grupos de extrema derecha organizados en el “National Front” (Frente nacional) y “Britain First” (Británicos primero). El sábado se sumaron miembros del British National Party (BNP), que cuenta con dos concejales en Rotherham desde el 2008, al grito de “Mahoma es un pedófilo”, informó News.sky.com.
La agencia Measuring Anti-Muslim Attacks (Tell MAMA) afirma que en esta semana ha habido 53 incidentes a nivel nacional relacionados con los abusos en Rotherham, que incluyen amenazas de muerte y de incendio a mezquitas, o la difusión del descalificativo ‘paki paedo’ (paquistaní pedófilo) por las redes sociales, porque la mayoría de los abusadores son de origen asiático.
También la organización Islam Rotherham denuncia que ha recibido llamadas telefónicas, correos electrónicos y mensajes de redes sociales con amenazas como: “Todas las niñas musulmanas deben ser violadas.”
Red de Mujeres Musulmanas destaca en su sitio web que el informe sobre los abusos encontró pruebas de la explotación infantil en la comunidad asiática. Estos casos se habían ocultado por temor a la cultura de “honor”, que señala a las niñas como deshonra para su familia tras haber sido violadas.
Tras la gran cobertura mediática, las mujeres con pleno conocimiento de la complicidad de sus maridos en la violación de las menores están comenzando a denunciarlos, informó The Guardian en su edición del 3 de septiembre.
Los taxistas y sus familias están siendo foco de las reacciones, porque el informe señala que la mayoría de las víctimas eran niñas menores de 11 años residentes de centros de acogida. Los violadores enviaban taxis a recogerlas “casi todas las noches” y las regresaban drogadas o ebrias, informa Europa Press. |