La política del gobierno hacia los organismos de derechos humanos provocó un daño tal que antiguos símbolos de combatividad y consecuencia con la lucha por encarcelar a los genocidas, hoy se sacan fotos con Milani, jefe del Ejército y probado autor de crímenes durante la dictadura; un daño tal que quienes eran la voz de los que no la tenían, hoy callan frente a la represión y la impunidad.
Sin embargo, la Plaza ayer era de resistencia y de lucha. Con las Madres había familiares, hijos y víctimas de la dictadura, estaba Vanesa Orieta, hermana de Luciano Arruga, una nutrida delegación de trabajadores y trabajadoras de Lear y Donnelley acompañados por integrantes del CeProDH como Victoria Moyano, nieta recuperada, Edgardo Moyano, abogado de los compañeros y Gloria Pagés, hermana de desaparecidos. Estaba el diputado nacional del PTS en el FIT Nicolás del Caño, Patricio del Corro, legislador electo del PTS en el FIT, el periodista Herman Schiller, Vilma Ripoll, integrantes de la directiva de la CTA, miembros de la Asociación de Ex detenidos desaparecidos, de APEMIA, del Colectivo Memoria Militante, de HIJOS Oeste, del sindicato docente Ademys, y muchos activistas y militantes que fueron a apoyar a las madres en este día.
Ayer se ratificó, como dijo Nora Cortiñas, que “estamos acá, porque reivindicamos la lucha de nuestros hijos, seguimos llevando las banderas de ellos, esas banderas de los que querían un país para todos y todas y ahora seguimos acompañando a los que siguen recogiendo esas banderas de lucha. Nosotras seguimos luchando, la resistencia es para que no haya impunidad, para que no haya desigualdad”.
Luego de varias rondas alrededor de la Pirámide, Nora Cortiñas tomó el micrófono en nombre de las Madres y señaló que “la primera violación a los derechos humanos es que hay hambre y que en la mitad del país no hay agua, que la usan las empresas nacionales y transnacionales para explotación de nuestro suelo. Las poblaciones indígenas son perseguidas, les plantan causas para intimidarlos y tenerlos presos”.
Fue muy emotivo cuando enumeró uno de los motivos de esta Marcha de la Resistencia: “Estamos por los trabajadores de Lear que están despedidos y están acá; estamos también acá por los trabajadores de Donnelley también”.
Luego denunció, “porque tomamos el ejemplo de nuestros hijos que eran internacionalistas”, los “diez años de la Minustah, nos da vergüenza que haya tropas argentinas en Haití”, así como la desaparición de los 43 normalistas en México. Llamó a no pagar la Deuda Externa y cerró diciendo que “esta marcha de la resistencia es para decir que nos resistimos a que no haya información sobre nuestros hijos e hijas, queremos que abran los archivos, que los jueves abran sus gavetas.”
A estas madres que no claudicaron, que siguen acompañando con sus años a cuestas las luchas de los trabajadores, de los presos políticos, que son parte de los que no bajan sus banderas a cambio del calor del poder y los cargos políticos, las acompañaros ayer Graciela Maidana que llegó junto a sus compañeras de la comisión de Mujeres de Lear, trabajadores despedidos y trabajadores de Donnelley. La “Chiqui”, como la conocen todos, decía: “Venimos a acompañar la marcha de las Madres porque la lucha que vienen llevando hace muchos años es muy importante, a pesar del sufrimiento. Nosotros nos sentimos muy apoyadas por ellas durante estos seis meses que la venimos peleando, ellas fueron muy importantes para nosotros en esta lucha, son un ejemplo, las vamos a seguir acompañando.Para nosotros fue un orgullo que Elia nos entregue su pañuelo de lucha, por eso le entregamos un pañuelo firmado por los trabajadores de Lear en agradecimiento por todo lo que nos acompañó”. |
