Corría el jueves por la tarde. Frente a Tribunales Federales, una vez más se exigía justicia a dos años de la desaparición forzada del joven Escobar. Familiares de víctimas del gatillo fácil de la ciudad acompañaban el reclamo. Pero había tres mujeres oriundas de la Provincia de Buenos Aires que también tenían una historia que contar, y sumarse al pedido de justicia. Eran las madres y hermana de Fernando y Sergio, dos de los siete jóvenes que murieron en la masacre de la Comisaría Primera de Pergamino en marzo de este año.
Subieron al escenario, y lograron captar la atención de todos. En sus miradas había dolor pero también mucha fortaleza. Sus voces llegaron a cada uno de los que estában ahí. Sus palabras atravesaban, en una mezcla de tristeza y odio: "Los dejaron morir, como perros. Los quisieron hacer pasar por un motin, pero los encerraron en esas jaulas hasta que se calcinaron vivos". Algunos sobrevivieron, otros están a la espera de justicia. Y ellas estaban ahí, firmes. Denunciando al Estado no sólo por la suerte que corrieron los pibes de la Primera, sino también como principal responsable de la situación en la que viven - y mueren - los pibes de los barrios en la total impunidad.
¿Por qué se hicieron presentes en esta jornada?
Estamos acompañando a la familia de Pichón porque sabemos lo dura que es la lucha y sabemos que se necesita la unidad de todos. Salir a la calle, que es lo que también estamos necesitando nosotros. Hace falta más presión social en estos casos, porque evidentemente cuando interviene la policía hay mucha impunidad y la justicia está de su lado, por lo que hay que estar muy encima para no dejar que hagan lo que quieran con estos casos y que no queden impunes.
¿En que estado se encuentra la causa en este momento?
En este momento esta en plena etapa de investigación y se pidió una prorroga para elevarla a juicio. Tenemos dos meses más para presentar pruebas, se avanzó bastante en el sentido que se logro la detención de cinco de los policías de los seis que están imputados. Estos efectivos están con prisión preventiva, y ahora le concedieron el arresto domiciliario a cuatro de ellos. Esto nos enoja, ya que le están dando domiciliaria a cuatro de ellos cuando todavía el Comisario está prófugo. Sabiendo y demostrando que en cinco meses no se pudo dar con el Comisario, y que hay todo una corporación que los esta protegiendo, es ilógica esta resolución del Juez de Garantías apoyada por la Cámara de Pergamino. Incluso hay uno de los policías que tiene domiciliaria está a dos cuadras de la familia de una de las víctimas, que es lo peor de toda esta situación.
¿Que respuesta recibieron por parte del Gobierno?
Silencio. Estábamos también en época de elecciones por lo que lo nuestro pasó a otro plano. Ahora estamos juntando firmas en Pergamino para reclamar una audiencia pública dónde queremos que se expidan todos los integrantes del Consejo Deliberante, y ver que se puede hacer. La policía en Pergamino esta bravísima, a raíz de todo esto también hemos sufrido hostigamiento en las marchas que hacemos o en cualquier tipo de manifestación nos sacan fotos, provocaciones por las redes sociales . Son cosas que hemos denunciado ante la justicia, asuntos internos y todos los lugares donde tenemos que llegar. Porque a nosotros no nos callan más, nosotros somos las voces de estos siete chicos que fallecieron en la comisaría.
¿Cómo se vienen organizando allá?
Y somos siete familias. Obviamente el dolor todavía es muy intenso entonces a veces cae una y sostienen las otras, y así continuamente. Ya pasamos a ser una familia todos, y como en cualquier convivencia hay por supuesto diferencia de opiniones o de como seguir con la lucha pero siempre con respeto. Y a raíz de eso se han hecho distintas actividades, radios abiertas, festivales, movilizaciones.
Ahora estamos en asambleas públicas convocando a todos los que nos quieran acompañar para llegar a toda la sociedad, que es lo más difícil de conseguir. Sabemos que es una causa que no es fácil para ponerse de nuestro lado. La gente lo ve como que la policía cumplió con su deber, como que favorecieron a la seguridad aunque no sabemos que tipo de seguridad. Nosotros lo que sostenemos es que no esta en tela de juicio las causas particulares de los chicos sino el delito que cometieron los policías y el Estado que es el responsable que estaban a su cuidado. Sabemos que esto se naturaliza, y es lo que queremos revertir y que esto no vuelva a pasar, para que el dolor de nuestros hijos y el nuestro no haya sido en vano.
La policía ese día no hizo nada para salvar a los chicos. Acá lo que estamos pidiendo es justicia y que los responsables paguen.No queremos que esto pase nunca más: que no haya más ningún Fernando, Noni, Jon, Alan, Federico, Franco y Sergio.
Antes de terminar la entrevista Cristina y Silvia, dos de las madres quisieron dejar un mensaje especial a la juventud: "Queríamos agradecer que a cinco meses de la masacre, pudimos hacer tantas cosas gracias a unos militantes y unos jóvenes que sin haber atravesado ninguna de estas situaciones y sin conocernos siquiera, pueden ponerse en nuestros zapatos y no tienen vergüenza de acompañarnos. Porque lo que le pasa a mucha gente es que les da vergüenza poder apoyarnos. Entonces gracias a toda esa juventud que milita por sus ideales, de corazón. Porque eso es lo que a veces nos ayuda a levantarnos. Es muy importante su acompañamiento". |