En medio de la crisis política por la desaparición de Santiago Maldonado, los candidatos no se olvidan que la campaña sigue y por ende el intento de polarización entre Unidad Ciudadana y Cambiemos va en aumento. Sobre todo en lo que es definido como “la madre de todas las batallas”, la Provincia de Buenos Aires.
Hace días Cristina Fernández de Kirchner publicó una carta en la que hace un llamado y pide el apoyo de todos aquellos que “quieran enfrentar este GRAN ajuste”.
Un llamado que encierra varias contradicciones a simple vista. Como ya analizamos en La Izquierda Diario, Cristina Kirchner “olvida” mencionar que todas las leyes de ajuste aprobadas durante estos años de gobierno macrista, vieron la luz en un Congreso donde el peronismo es mayoría.
Como para sumarle poca credibilidad a la impostura de polarización y “oposición consecuente”, desde la dirigencia sindical ven en Unidad Ciudadana un espacio como para mantenerse en la palestra de la política luego de los magros resultados en las primarias de algunas listas a las que apostaron.
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¿Tregua y oposición?
Héctor Daer, secretario general del gremio de Sanidad y uno de los triunviros de la CGT, no parece tener vergüenza en saltar de un espacio político al otro sin problemas. Diputado nacional por el massismo, apoyó a Randazzo en las PASO y ahora se cruza a la vereda de Unidad Ciudadana.
Daer dijo el último domingo que respaldará a quien “le haga fuerza al Gobierno nacional”. En principio debería reconocer que ya sea desde el Congreso Nacional (el bloque del Frente Renovador le votó prácticamente todas las leyes de ajuste al macrismo). Y desde la conducción de la CGT su intención es más bien garantizarle la gobernabilidad a Cambiemos. Al igual que otros dirigentes sindicales tradicionales, está mucho más preocupado por su futuro en la rosca electoral que por enfrentar el ajuste y las consecuencias que ya tiene sobre miles de trabajadores.
Otro que sigue su camino es Antonio Caló. El dirigente de la UOM, se distanció apenas de Cristina Kirchner durante la última etapa de su Gobierno. En las PASO apostó sus fichas al proyecto de Randazzo. Los resultados hicieron que rápidamente cambiara de opinión.
Caló afirmó ayer que “los compañeros peronistas tienen libertad de acción para elegir a quién más le guste, en el caso nuestro quién nos representó fue Florencio Randazzo. Ahora si los compañeros ven que el voto útil está en otro lado, lo pueden hacer”. Y luego para darle entidad al “voto útil”, dijo: “Quiero que Taiana sea senador”.
Luego de garantizarle la gobernabilidad a Cambiemos en una abierta tregua en la cual miles de trabajadores perdieron su empleo, los salarios se vieron afectados por los tarifazos y el ajuste, estos dirigentes sindicales (como muchos otros) pretenden posar de opositores apoyando la candidatura de Cristina Kirchner mientras alimentan la falsa polarizaición y la lógica del “voto útil”.
En ese caso deberían al menos explicar qué utilidad o beneficios puede tener esto para el pueblo trabajador cuando todo este personal político y sindical le viene garantizando de diferentes formas la gobernabilidad y las leyes de ajuste al macrismo.
Queda de nuevo demostrado que estos dirigentes sólo actúan en función de sus propios intereses como casta privilegiada. Por eso no tomaron ninguna medida seria ante el ajuste. El kirchnerismo y Unidad Ciudadana dicen que hay que "resistir ese GRAN ajuste". Si estos son sus aliados, queda claro de entrada que esa resistencia es sólo de palabra |