Una reunión que tuvo lugar ayer en el Ministerio de Trabajo entre la empresa Proteinsa S.A., el STIA (Sindicato de Trabajadores de la Alimentación) y veedores enviados por los obreros culminó con un ofrecimiento que los trabajadores decidieron no aceptar.
La empresa les ofreció una "gratificación" de $15.000 en 3 cuotas (a cobrar en septiembre, octubre y noviembre) y devolverles la antigüedad perdida cuando se produjo el cambio de firma. Cabe recordar que a fines de 2015 la anterior propietaria Rasic Hermanos se declaró en quiebra y los trabajadores fueron recontratados perdiendo su antiguedad; en ese momento les ofrecieron cobrar indemnizaciones, hecho que aun no se concretó y que motiva el actual conflicto, a lo que se suma la falta de reintegro a sus puestos de trabajo de una parte de los obreros.
La propuesta patronal fue rechazada en ambas plantas de la empresa en la zona sur del Gran Buenos Aires, que definieron cortar la autopista Ezeiza - Cañuelas mientras un sector de ellos se dirige al Aeropuerto de Ezeiza. | 
