Racing se juega el objetivo más importante de este semestre: la Copa Sudamericana, y nada más y nada menos que frente a uno de los grandes de Brasil, en San Pablo y frente al único líder del Brasileirao, el Corinthians.
Por la ida de octavos de final, Diego Cocca apostó por la formula que le dio la clasificación a la Copa Libertadores 2018: los cinco defensores y dos volantes yendo y viniendo por las bandas para cerrarse atrás. En el comienzo del encuentro, La Academia buscó dominar con tenencia del balón, y si bien por momentos lo logró siempre existió una desconexión entre los defensores y los volantes quedando los delanteros muy aislados, una falencia permanente en sus últimos partidos disputados, sin lograr lastimar en las llegadas.
El local hizo meritos y a través de Maycon marcó el 1 a 0 a un Racing que, con una línea de cinco, no pudo frenar las llegadas. Minutos antes Rodriguinho con un cabezazo hizo temblar el travesaño, vaticinando lo que ocurriría minutos después.
Al igual que en el partido por Copa Sudamericana contra Rio Negro Aguilas Doradas, el arquero de Racing, Juan Musso tuvo que salir por lesión ingresando en su reemplazo Gastón Gómez. Ambos fueron fundamentales en el desarrollo del partido mostrando un gran nivel.
En el segundo tiempo Racing intentó nuevamente dominar el encuentro, esta vez con mayor cantidad de llegadas. Finalmente en el minuto 74, Triverio marco la igualdad del partido al capitalizar un rebote del arquero Cássio producto de un remate de Lisando López, algo que se esperaba que ocurriera por el desarrollo del partido.
“Le faltamos el respeto en el buen sentido”, señalo Diego Cocca luego del partido, en referencia al segundo tiempo y la reacción del equipo para revertir el resultado adverso. El conjunto argentino pudo demostrar un cambio de temperamento, con actitud más que con buen juego y de la mano de su capitán que incansablemente sacó al equipo adelante. Dejó una buena imagen y la serie abierta para la definición de local. | 
