El pasado martes, tras una intervención realizada por la Auditoría General de Asuntos Internos en la Comisaría 1° de la capital bonaerense, se encontró una caja con más de 800 mil pesos, el Comisario Pablo Fernando Orgoñez en un primer momento declaró que el “dinero provenía del pago de las horas POLAD”, pero rápidamente se descubrió que esto era falso. A partir de este hecho fueron desafectados 7 oficiales, entre ellos el mismo Orgoñez, el oficial inspector Hugo Javier Díaz y el oficial principal Diego Ismael Martínez.
Desde algunos sectores apuntaron a que el dinero podría provenir de las arcas de la Municipalidad de La Plata, lo cual provocaría un nuevo escándalo en el municipio ya que vincularía al dinero encontrado en la comisaría 1° con el Intendente de Cambiemos Julio Garro.
Ya es costumbre que salgan a la luz casos de este tipo, como fue la causa de los sobres. Detrás de la gran mayoría de delitos ligados a la corrupción, el narcotráfico y la trata de personas, casi siempre hay implicados miembros de la Policía y en muchas ocasiones altos funcionarios de la fuerza.
Mientras desde el gobierno cínicamente intentan mostrarse con un discurso de renovación de la Policía, la gobernadora María Eugenia Vidal refuerza las calles cada vez más con nuevos agentes de la ley que son los mismos que están detrás del crimen organizado. La misma fuerza que mata a un pibe cada 25 horas a causa del gatillo fácil, los mismos que están implicados en las coimas y la corrupción, porque es toda la fuerza la que está enquistada en las mafias y las que garantizan el crimen para su propio beneficio.
En el medio de la enorme crisis política que tiene el gobierno de Macri, por la desaparición de Santiago Maldonado, las fuerzas represivas se encuentran en tela de juicio por el conjunto de la sociedad, mientras que desde el oficialismo se muestran con un discurso de renovación y combate al crimen interno, casos como este dan cuenta que es toda la institución la que es corrupta, que la mafias policiales siguen operando igual que siempre, y que la única forma de terminar con esto es el desmantelamiento de todas las fuerzas represivas del Estado. |