Como parte de los esfuerzos organizativos que se vienen realizando ante el sismo que sacudió la Ciudad de México y varios estados el 19 de septiembre, los maestros y los padres de familia hemos comenzado a organizarnos, en este caso convocados por la Coordinación de Maestr@s de la Región Oriente de Iztapalapa (Sección 9 CNTE) y la Asamblea de Coordinación de las Secciones 10 y 11 de la CNTE.

La primaria Lafragua es una escuela emblemática de la delegación Iztapalapa, destacó por su participación en la lucha del 2016 contra la reforma educativa y se distingue desde hace años por la organización que se ha conquistado entre maestros y padres de familia, además de su importante papel en la coordinación de las escuelas de la región.

Eso se vio expresado en la asamblea de cientos de padres de familia que acudieron, provenientes de varias escuelas, a la convocatoria de Lafragua para organizarse ante los efectos del terremoto. Entre sus principales resoluciones y demandas destacan:

• Hacer un censo de las escuelas con y sin daños conforme se vayan realizando los peritajes y emitiendo los dictámenes, revisando la validez de los resultados.

• Exigir la puesta en marcha de un programa de reconstrucción y reparación de las escuelas en situación de riesgo.

• Luchar por un presupuesto de emergencia para financiar las obras y evitar la implementación del programa Escuelas al CIEN.

• Integrar el presupuesto que reciben los partidos políticos y las cuotas sindicales que quincenalmente se descuentan a los docentes a los programas de reconstrucción de vivienda y de las escuelas de la población afectada por los sismos.

• Convocar a otras escuelas a sumarse a la próxima asamblea, el jueves 28 de septiembre a la una de la tarde en Lafragua.

Concluida la asamblea con los padres, nos reunimos maestros de primarias y secundarias de veinte escuelas.

En la asamblea de maestros se insistió en la necesidad de tomar todas las medidas para garantizar una vuelta a clases en condiciones seguras, proponiéndose por ejemplo la participación de peritos independientes para validar los peritajes oficiales.

Se habló de la importancia de la respuesta solidaria por parte de la juventud y el pueblo trabajador, en contraste con el nefasto papel del gobierno y sus intentos por desarticular la organización en las calles en apoyo a los damnificados.

Al retomarse los resolutivos de la asamblea de padres, desde Nuestra Clase propusimos que, además de las medidas señaladas para obtener presupuesto para la reconstrucción de casas y escuelas, se exigiera un impuesto a los grandes empresarios y a las cadenas comerciales que se enriquecen con la tragedia y el no pago de la deuda externa.

Planteamos también la necesidad de articularnos con otros sectores, como las madres que se vienen organizando en la Gustavo A. Madero y los estudiantes que en grandes asambleas han decidido no reanudar clases y continuar solidarizándose en las calles.

Leer: Madres y padres de familia exigen revisión exhaustiva de escuelas en Gustavo A. Madero

Asimismo, que para conseguir que el SNTE done nuestras cuotas sindicales, debemos arrancarlo con la movilización de maestros, padres, damnificados y los sectores que han salido a solidarizarse.

Entre los resolutivos que se sumaron a los acordados con los padres destacan:

• Incorporar la demanda de solución al problema de desabasto de agua en Iztapalapa.

• Exigir la suspensión de la evaluación docente ante la falta de condiciones para llevarla adelante, por ejemplo la pérdida de casas de maestros. Mencionándose además el costo que implica la evaluación y que esos recursos podrían ser destinados a los damnificados.

• Impulsar acopios y su organización en las escuelas.

• Convocar a nuestros compañeros de escuela a asistir a la asamblea del jueves 28 en Lafragua.