Ayer mientras dos estudiantes repartían volantes por la campaña electoral del Frente de Izquierda y Nicolas del Caño en la Escuela de Economía y Negocios de la Universidad Nacional de San Martín, fueron increpados por la seguridad privada del establecimiento que intentó echarlos bajo el increíble argumento de que está prohibido el ejercicio político dentro de la universidad.
Ante la resistencia de los estudiantes a abandonar el establecimiento, fueron amenazados echados por la fuerza con la policía. Esta muestra de intolerancia y ataque sobre los derechos de los estudiantes que se organizan no es un hecho aislado, a principio de año el futuro rector Carlos Greco empujó al presidente del Centro de Estudiantes de Humanidades para sacárselo del camino cuando se acercó junto a estudiantes que dejaron afuera de la carrera de psicopedagogía y querían tener el derecho a revisar sus exámenes, o a mitad de año cuando estudiantes fueron golpeados por una patota y miembros de la seguridad privada al querer ingresar al campus el día de las elecciones de rector.
La defensa del derecho a organizarse por parte de los estudiantes y la autonomía universitaria deben ser defendidos frente a los intentos de avance y provocaciones que se realizan por parte del gobierno nacional y las autoridades universitarias. | 
