En días recientes, el portal de noticias Animal Político hizo públicas cifras de víctimas del terremoto del 19-S que no fueron mencionadas por los grandes medios. Muchas de ellas tienen algo en común: fueron personas que murieron al interior de grandes tiendas de la empresa Liverpool y Walmart.
En el caso de Galerías Coapa, un complejo comercial donde Liverpool tiene una de sus tiendas, hubo decesos que a pesar de ser registradas ante la Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México, no fueron objeto de informes oficiales públicos. Mucho menos parte de los comunicados emitidos por empresas como Liverpool, quien omitió mencionar los fallecidos.
No es la primera vez que la empresa Liverpool encubre muertes de sus trabajadores. Angélica Trinidad Romero fue asesinada el 15 de noviembre de 2014, un día antes de El buen fin (una fecha de descuentos y ofertas comerciales en México), en Liverpool Perisur. La tienda alteró la escena, evitó reportar el crimen, se negó a entregar videos de vigilancia y amenazó a los familiares que exigían saber lo ocurrido con Angélica.
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Por su parte, en la sucursal de Walmart ubicada en la delegación Tlalpan (ubicada al sur de la ciudad), hubo tres personas fallecidas, cuyas muertes no fueron reportadas oficialmente. El desinterés de esta empresa por la vida de sus trabajadores no sólo se expresó en esta omisión, sino en distintas denuncias que mostraron cómo no se permitió a empleados evacuar las tiendas.
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La empresa, que en mayo de este año enfrentó junto con Sam´s Club y Aurrerá denuncias por parte de sus empleados por el robo que fue para miles de ellos el pago de utilidades, tras el sismo del 19-S, únicamente se limitó a asegurar que todas sus tiendas habían sido evaluadas e informó sobre los "donativos" a damnificados.
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Esto es sólo un capítulo más de la serie de irregularidades evidenciadas tras el terremoto que conmociono la ciudad de México en donde, son las familias más pobres quienes sufren las tragedias y son las autoridades y los patrones los principales responsables.
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