El miércoles 18 salió electo el Decano Alberto Bueres, continuidad del oficialismo con el apoyo de consejeros estudiantiles, profesores, y graduados radicales y la minoría kirchnerista del claustro de graduados, en una elección totalmente antidemocrática como viene funcionando el cogobierno universitario.
La elección transcurría durante la conferencia de prensa que brindaba la familia de Santiago Maldonado. En momentos en que todo el país está conmocionado por la noticia del cuerpo hallado en el río Chubut y a la espera de confirmar si pertenece o no a Santiago, las autoridades de la Facultad de Derecho se auto-regocijaron en elogios a su cogobierno de hace décadas, en un clima de “fiesta democrática”, mientras se ven vulnerados derechos humanos fundamentales por parte del Estado.
Alberto Bueres, anterior Vicedecano de Mónica Pinto, del espacio político ligado a la UCR/ Franja Morada y Daniel Roque Vítolo (1) fueron los candidatos para que Cambiemos mantenga el gobierno de la facultad a espaldas de toda la comunidad educativa.
A esta altura de los acontecimientos la posición de las autoridades de la Facultad no es sólo apelar al silencio, sino también a la provocación en un clima alegre y reivindicatorio de una gestión alineada al gobierno nacional. Bueres ya había encabezado la sesión del Consejo Directivo dónde votó en contra de pronunciarse por la aparición con vida de Santiago Maldonado.
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A su vez, una gestión que niega la responsabilidad de la Gendarmería Nacional Argentina y hace una defensa acérrima de esa fuerza, como se comprobó cuando Patricia Bullrich fue invitada a un panel de debate el mismo día que se cumplían 11 años de la desaparición de Jorge Julio López y había una marcha convocada exigiendo tanto justicia por el testigo que condenó a Etchecolatz, como por la aparición con vida de Santiago. Por el rechazo generado entre estudiantes y docentes, debieron suspender la actividad.
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El Kirchnerismo avaló el candidato del gobierno
El Kirchnerismo con su consejero por la minoría del claustro de graduados, Fernando Muriel, levantó la mano para avalar las autoridades y la política de Cambiemos en la facultad. Votaron junto con Franja Morada al Decano radical alineado con el gobierno y el rectorado, el mismo que se negó a tratar en sesión de Consejo Directivo la desaparición forzada de Santiago Maldonado.
No pidió la palabra para plantear que era inadmisible sesionar mientras miles de estudiantes y docentes estamos convulsionados con las novedades del caso.
Tampoco propuso un repudio siendo que a 80 días después de su desaparición, las autoridades de la facultad vienen demostrando su aval al gobierno en el caso. Mucho menos para denunciar el carácter antidemocrático de la elección y a una gestión que es ejemplo en aplicar los planes de ajuste educativos y de privatización.
Empieza a trasladarse dentro de Derecho un rol político que ya conocimos en la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires, donde el PRO gobierna sin mayoría desde el año 2007, al igual que en el Congreso Nacional. Gracias a la ayuda de las diferentes bancadas peronistas y radicales, el PRO logró aprobar decenas de leyes que les garantizaron grandes negociados a los amigos empresarios de Mauricio Macri. El ejemplo más visible, literalmente, es la concesión de un predio lindero a Parque Thays, frente a la facultad, para construir el "Centro de Exposiciones y Convenciones de la Ciudad", privatización del espacio público que podemos observar todos los días.
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La votación: 6 consejeros por claustro de profesores, 4 por graduados (3 mayoría radicales y 1 minoría peronista) y 1 por el estudiantil (Franja Morada) votaron a favor de Alberto Bueres. La mayoría estudiantil de Nuevo Derecho (3) dió su voto negativo.
Aunque la actual conducción del Centro de Estudiantes y mayoría estudiantil no votó al actual Decano, tanto La Nuevo Derecho como Franja Morada actualmente apoyan la candidatura de Lousteau, en Evolución, para las elecciones en la Ciudad de Buenos Aires, que a su vez, funciona como una colectora del macrismo.
Fortalecer una oposición real, por la democratización y que exija justicia por Santiago
Realizar esta elección como si nada de la realidad atravesara a la Facultad, es parte de una trayectoria instalada por las autoridades garantes del funcionamiento de una universidad que está organizada, por sus contenidos académicos y su infraestructura material, económica y salarial, al servicio del mercado y para hacer profesionales del Estado; jueces, fiscales, legisladores y gobernantes. El radicalismo ha mantenido esta trayectoria y política durante décadas.
Quiénes peleamos por una educación superior al servicio de los trabajadores y sectores populares, y contra la impunidad de las fuerzas represivas, también lo hacemos por la democratización (2) de la universidad, proponiendo una votación con la mayoría estudiantil, claustro único docente para terminar con los privilegios de una casta de profesionales, y voz y voto para los trabajadores no docentes.
Esta crítica es la que sostuvimos siempre en Derecho y en todas las universidades y es parte del programa, de las ideas que levantamos como organización anticapitalista en la UBA y en todo el país, es nuestra tradición.
La votación a Decano evidenció un régimen totalmente antidemocrático y adicto a la política del gobierno nacional que puede ser desenmascarado con la organización de los miles de estudiantes, docentes y no docentes que defendemos la universidad pública y que en este momento exigimos la inmediata renuncia de la Ministra de Seguridad Patricia Bullrich, para reclamar que se investigue y se juzgue a todos los responsables políticos y materiales de la desaparición de Santiago Maldonado.
Notas:
1) Daniel Roque Vítolo, proveniente de un linaje mendocino de abogados radicales y católicos ligados a las empresas. Fue abogado de Jorge Bergoglio durante sus años de arzobispo y redactor de la Ley de Concursos y Quiebras. Es abogado de multinacionales y bancos, estuvo asociado en los 90 al estudio Klein y Mairal, este último conocido por representar a Donnelley en la quiebra fraudulenta. Es desde hace 10 años director del departamento de derecho económico- empresarial de la Facultad y su familia históricamente estuvo ligada a la política: su padre, Alfredo Roque Vítolo, fue ministro del Interior del presidente Arturo Frondizi; Su hermano, Alfredo Isidoro, creó en 1999 el Movimiento De la Rúa Presidente, para canalizar apoyos castrenses a su candidatura y en 2005 publicó el libro “Amnistías políticas argentinas”, en el que hoy se basa su sobrino y actual asesor del gobierno para propugnar el perdón a los militares detenidos por crímenes de lesa humanidad.
2) A puertas cerradas y sin ninguna información es elegida la máxima autoridad de la facultad por medio de una antidemocrática elección de 16 consejeros, dónde la representación de la inmensa mayoría estudiantil -30.000 en Derecho- se ve reducida a cuatro consejeros y una casta de 8 consejeros del claustro de profesores y 4 de graduados deciden por mayoría automática sobre el presupuesto y realidad de los miles de docentes que no se encuentran concursados (incluidos los ad-honorem que no tienen voz ni representación alguna), y donde personal no docente que no cuenta con ni si quiera con voto. |