Azul Montoro, de 26 años, fue asesinada en la madrugada del miércoles. El repudio a este hecho se viralizó por las redes sociales entre amigos, amigas, activistas de la diversidad sexual y militantes de distintas organizaciones y partidos.
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Así, desde las 17hs de ayer, casi 200 personas se movilizaron ayer desde la Central de Policía ubicada en Avenida Colón y Santa Fe hasta la casa donde encontraron el cuerpo de la joven.
La convocatoria fue impulsada por la Asociación de Travestis, Transexuales y Transgéneros de Argentina (ATTTA), la Asociación de Mujeres Meretrices de Argentina en Córdoba (AMMAR) junto a organizaciones de la diversidad sexual como Putos Peronistas, el Centro Socio-Cultural Laura Moyano, la Coordinadora Justicia por Laura Moyano, Devenir Diverse y contó con el apoyo de algunas organizaciones políticas como Pan y Rosas, Juventud del PTS en el Frente de Izquierda, Izquierda Socialista, entre otras.
“Azul Montoro se suma a la dramática lista que integran: Estrella Sánchez, Laura Moyano, Denisse Montenegro, Cindy Arias, Vanesa Ledesma, Pamela Torres, Marion Goriak, Viviana Echenique, entre otras”, señalaron.
“Azul fue asesinada de manera brutal, con alevosía y saña, víctima de un agresor perverso y de un sistema que lo construye. A cinco años de la sanción de la Ley de Identidad de Género en nuestro país, y ante la evidente vulneración de nuestros Derechos Humanos que lleva a cabo el Estado y la sociedad hacía la población trans, emitimos nuestro repudio, alerta y el reclamo por el esclarecimiento de este brutal femicidio. Las mujeres trans somos foco de la violencia por causas de género que de manera silenciosa y/o silenciada, diariamente se va llevando la vida de nuestras compañeras. Hoy lamentamos volver a decir, como hace 24 años atrás en nuestra conformación inicial, que NOS SIGUEN MATANDO”" sostuvieron mediante un comunicado desde ATTTA.
El asesinato de Azul sucedió a casi tres meses de que hubo una importante movilización a 2 años de que sucediera el travesiticio de Laura Moyano.
Estos travesticidios o transfemicidios son el último eslabón de una larga cadena de violencia que viven las y los trans. Desde no poder acceder a un trabajo digno, desde el ser expulsadas o expulsados del sistema de salud o de educación, etc.
Sin embargo, lejos de quedarse calladas o callados, se organizan y movilizan. Siguen dando pelea para garantizar todos sus derechos conquistas y avanzar para poder conquistar nuevos derechos.
Así, en la movilización también exigieron que se traten y aprueben los distintos proyectos de inserción laboral para personas trans. Tal es el caso del proyecto de cupo laboral trans que fue presentado en la legislatura cordobesa por Laura Vilches del PTS-Frente de Izquierda.
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También exigieron derecho a la educación y a la salud para la población trans que al día de hoy, a 5 años de aprobarse la Ley de Identidad de Género, sigue sin implementarse el área sanitaria. Aún no se realizan en todos los hospitales las operaciones de "reasignación de sexo" e incluso algunas personas trans presentaron problemas para acceder a este derecho. Tal fue el caso de Jacqueline Muriado a quien Apross le negó en un principio su derecho a realizarse una operación amparada por la LIG.
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En tanto, el fiscal Guillermo González se encuentra a cargo de la investigación de la causa. Habría un detenido que sería el autor del asesinato. | 
