Tras las denuncias de clientelismo que cruzaron Cambiemos y el oficialismo provincial durante las elecciones, el supermercadista Emilio Luque intentó desvincularse de los hechos: “no tengo nada que ver con la campaña; no hay personal de la compañía que tenga que ver con ningún político”, y explicó que los tickets que repartieron ambas fuerzas políticas junto con los votos, no tienen número de serie (por lo tanto no se puede rastrear la operatoria), y que vende esos tickets a mutuales, cooperativas, y empresas que abonan una parte de los salarios de los trabajadores con estos vales.
Según el poderoso empresario, se trataría de una práctica “sana" que "no implica evasión alguna, ya que el que adquiere los productos en los supermercados de la firma con estos tickets recibe la factura por todo lo que se compra”.
Pero el hecho que se investiga no es la evasión impositiva, sino las prácticas clientelares en las que ha quedado envuelto. Mención aparte merece el hecho de que haya logrado convertir sus vales en una suerte de medio de pago que sólo pueden ser canjeados en sus propias tiendas.
Durante las elecciones se registraron más de 70 denuncias de clientelismo ante la Justicia Nacional Electoral, que incluyeron el acarreo de votantes en vehículos identificados con animales que trabajaron para el intendente Darío Monteros en la Banda del Río Salí, o la entrega de vales por alimentos y combustible con la firma del presidente de la UCR, Julio César Herrera.
Todas estas denuncias recayeron en el juzgado de competencia electoral a cargo del juez federal Daniel Bejas, ex apoderado de las empresas de la familia Alperovich, y con fallos favorables al oficialismo provincial como el sobreseimiento de Juan Manzur en la causa que tuvo por enriquecimiento ilícito durante el período en que pasó a ser el funcionario más rico del gobierno anterior.
En el día de ayer el vicegobernador y diputado electo, Osvaldo Jaldo, anunció que no se eliminará el sistema de acoples hasta después de las elecciones de 2019.
En relación a estos hechos, la referente del PTS en el Frente de Izquierda, Alejandra Arreguez, afirmó que: “El anuncio de Jaldo parte de un acuerdo tácito entre Cambiemos y el PJ para que no se modifique este régimen electoral fraudulento. Entre comicios y comicios existe todo un aparato que se sostiene con fondos estatales para regimentar la vida los barrios a partir de las necesidades acuciantes de los sectores más castigados (...) Hay poner fin a este sistema de acoples y establecer la reducción de las dietas de los funcionarios al equivalente del salario de un docente. Además planteamos la eliminación del secreto bancario sobre todos los funcionarios y empresas privatizadas y vinculadas a la obra pública, y la conformación de una comisión investigadora independiente del gobierno provincial y nacional para realizar una auditoria pública sobre los fondos que se manejan desde el poder ejecutivo y la legislatura”. |