Veinticuatro universidades en Ontario, Canadá entraron en huelga desde el 16 de octubre. En ésta participan 12, 000 profesores, instructores, consejeros, y bibliotecarios. Están en contra una nueva norma de precarización laboral para los académicos de universidades, que implica incrementar el número de contratos por corto periodo (faculty contracts), en lugar de los permanentes (full time faculty).
En las universidades y colegios de Canadá está aumentando la tendencia de los contratos por corto periodo en lugar de los de tiempo completo y permanentes.
Los profesores por contratos de corto periodo ganan menos por cursos que los profesores de tiempo completo, y no cuentan con beneficios de salud o pensión, no tienen seguridad laboral, y como son contratados por cierto tiempo en específico, no tienen la seguridad de un sueldo estable.
De igual manera, cuentan con otro tipo de desventajas: poca anticipación de aviso para preparar los cursos, tener que enseñar a cientos de estudiantes al semestre y no contar con un espacio donde reunirse con ellos, poca o nula ayuda para desempeñarse en investigación y participación restringida con el resto de la comunidad universitaria, en comités, por ejemplo.
Los profesores en huelga demandan contratos más largos, una relación de igualdad entre los profesores de medio tiempo y los de tiempo completo, y mejora de salarios y seguridad laboral. Tanto los profesores precarizados como los de contrato permanente participan en la huelga.
Los profesores por contratos de corto periodo representan el 70 por ciento del total de profesores, mientras que los de contrato permanente, el 30 por ciento.
Además, la Asociación Canadiense de Profesores Universitarios (CAUT, por sus siglas en inglés) calcula que desde 1999 ha aumentado en un 200 por ciento el número de contratos por corto periodo, mientras que los permanentes lo han hecho tan sólo un 14 por ciento.
Esto se da al mismo tiempo que el Sistema de Universidades Públicas de Ontario cumple cincuenta años éste 2017. Desde hace cincuenta años el financiamiento del gobierno de la provincia a las universidades ha disminuido hasta llegar del 75 por ciento al 37 por ciento hoy en día, colocando a Ontario como la provincia que menor financiamiento por estudiante ofrece en Canadá.
Desde 1989 el número de estudiantes ha crecido más del doble pero los profesores permanentes han disminuido, en tanto que los de contratos por corto periodo han aumentado de manera importante. También, han incrementado las colegiaturas para los estudiantes, quienes atienden clases cuyo número de estudiantes ha aumentado por aula.
Quienes han sido beneficiados en estos años son los que ocupan puestos administrativos, pues han aumentado su número en un 77 por ciento desde el año 2002, y han gozado de aumentos salariales hasta en un 50 por ciento. |