En un comunicado de la Red Universitaria de Apoyo al Congreso Nacional Indígena (CNI) se detalló que los universitarios que simpatizan con esta candidatura, realizarán un gran acto de recibimiento a la vocera del Concejo Indígena de Gobierno.

Señalan que: “Nos vemos el próximo 28 de noviembre para encontrarnos, escucharnos y caminar juntas y juntos. Nos toca como mujeres y hombres -universitarixs, trabajadoxs, niñxs, vecinxs, ciudadanxs, etc- imaginar el envés del desastre y organizarnos para vivir con dignidad. ¡Recibamos a Marichuy y al Concejo Indígena de Gobierno en la Ciudad de México” El acto será organizado por la red universitaria.

La UNAM ha sido la sede de fuertes movimientos: de los paros estudiantiles por la represión al magisterio al movimiento por la desaparición de los 43 de Ayotzinapa.

Marichuy es la vocera del CNI que agrupa a pueblos indígenas: Amuzgo, Binnizá, Chichimeca, Chinanteco, Chol, Chontal de Oaxaca, Chontal de Tabasco, Coca, Comcac, Cuicateco, Cucapá, Guarijío, Ikoots, Kumiai, Lacandón, Mam, Matlazinca, Maya, Mayo, Mazahua, Mazateco, Mixe, Mixteco, Nahua, Ñahñu/Ñajtho/Ñuhu, Náyeri, Popoluca, Purépecha, Rarámuri, ,Sayulteco, Tepehua, Tepehuano, Tlapaneco, Tohono Oódham, Tojolabal, Totonaco, Triqui, Tzeltal, Tzotzil, Wixárika, Yaqui, Zoque, Afromestizo y Mestizo.

Catalejo

Las elecciones de 2018 se dan en el contexto del ascenso de Donald Trump. En el medio de un fuerte cambio en México -la renegociación del TLC- que aumentará los lazos de subordinación al gigante del norte.

El escenario político dominante es el de la aplicación de todos los planes -reforma educativa, laboral, energética, militarización, aumento de megaproyectos- y el surgimiento de fenómenos de descontento que han sido históricos pero que no alcanzaron a torcer el brazo al gobierno: la lucha magisterial de 2013 o el movimiento por los 43.

Existe enojo y descontento del México profundo: contra el feminicidio, la desaparición forzada, al asesinato de periodistas, existe indignación y hasta saqueos durante el gasolinazo. El descontento es tal que sectores del empresariado mexicano ha decidido apoyar a AMLO y Morena como carta de desvío ante la situación. Su carta mayor: Pablo Romo.

Dicho partido, si bien capitalizó mucho de este descontento, hoy recibe a empresarios “honestos” y nunca puso sus fuerzas al servicio de tirar las reformas e insiste que México puede cambiar combatiendo la corrupción.

El zapatismo, por su parte, que desde 1994 impactó sobre franjas de la juventud, durante los últimos años dejó de actuar en la política nacional en un proceso que muchos llamaron de “autoaislamiento”, y en particular evitó responder ante los principales hechos de la lucha de clases nacional, desde el 2006 a la fecha.

De la ofensiva del régimen político, la militarización de la "Guerra contra el narcotráfico" y la entrega del territorio a las trasnacionales -parques eólicos, minería a cielo abierto, privatización de los bienes de la naturaleza- una de la peor parte la viven los pueblos a quienes quieren despojar de su territorio y con ello lo más sagrado: su cultura.

Hay cientos de focos rojos en el país que son una alarma de conflictos por territorio en el que los pueblos indígenas están involucrados. De Michoacán a Chiapas, de Chihuahua a Oaxaca el estado ha usado el Ejército y paramilitares al servicio de las grandes trasnacionales.

Las trampas del INE y la posición de los socialistas

El CNI denunció en conferencia de prensa con la participación de Juan Villoro que el mecanismo de recolección de firmas del INE es racista, clasista y discriminatorio.

Marichuy hoy ha registrado poco más de 40 mil apoyos ciudadanos, militantes de organizaciones sindicales o políticas de izquierda en lo individual apoyaron el derecho democrático a que obtenga el registro. Hoy ella está en tercer lugar para conseguir el registro para las elecciones. El “Bronco” y Margarita Zavala tiene un poco más del doble de la compañera del CNI: lo que muestra el carácter de clase del registro electoral.

Los socialistas del MTS hemos denunciado que el INE tiene un carácter antidemocrático, clasista y reaccionario para impedir la participación electoral de las organizaciones de izquierda, obreras y populares: impedir que los del México profundo consigamos una representación política propia.

Por eso es que desde el año pasado llamamos a impulsar una gran y unificada campaña contra las restricciones y trabas del INE, y que ahora denunciamos las trabas que enfrentan el CIG así como las organizaciones de izquierda que aspiramos a participar del proceso electoral.

A la par, hemos planteado un debate político y estratégico con el EZLN y la candidatura de Marichuy, en torno la perspectiva de un verdadero anticapitalismo: nosotros consideramos que hay que impulsar la movilización contra este régimen y sus partidos, hasta lograr un gobierno de los trabajadores junto al resto de los oprimidos y explotados del campo y la ciudad.

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Los socialistas del MTS, además de denunciar al INE en estas elecciones, hemos decidido realizar una campaña anticapitalista en la Asamblea Legislativa de la Ciudad de México para expresar nuestro programa, encabezada por dos trabajadoras: Sulem Estrada (maestra de secundaria) y Miriam Hernández, trabajadora de la UNAM, como explicamos acá.

Volveremos a poner el pie una campaña electoral recuperando las experiencias que hicimos en Ciudad Juárez con las obreras en lucha de la maquila en Ciudad Juárez de Foxconn, EATON y Lexmark y en la Ciudad de México durante la “Asamblea Constituyente” de Miguel Ángel Mancera.

Nuestro proyecto es generalizar: “que todos los funcionarios público ganen los mismo que una maestra” y que “todos trabajemos 6 horas 5 días con el mismo salario”. Una campaña que retoma las mejores experiencias de la Comuna de Paris: el primer gobierno proletario de la historia.