Vencido el plazo para la presentación de listas el jueves pasado, las posibilidades de cerrar un acuerdo de unidad no habían logrado concretarse. Fue por eso que la Junta Electoral les dio tiempo a Espinoza y a Menéndez para que logren arribar a un acuerdo y “unifiquen candidaturas”, extendiendo el plazo hasta este martes 21, algo que tampoco logró concretarse.
Los intentos de unificar ambas listas se hicieron ayer en el despacho del diputado nacional José Luis Gioja, actual presidente del PJ nacional, quien ofició de mediador. El espacio que conduce Menéndez, autodenominado “Unidad y Renovación”, propuso que la Secretaría General del partido fuera ocupada por la actual intendenta de La Matanza, Verónica Magario. La respuesta de Espinoza fue contundente: propuso que los representantes de las ramas gremial y de juventud se repartieran en partes iguales, y que la presidencia del Consejo también sea repartida, alternando el primer año para Menéndez y en 2019 que ese lugar lo ocupe Magario. No hubo acuerdo y la interna parece ser un hecho, aunque la definición se estirará hasta el viernes.
Tras los fallidos intentos de lograr la unidad, los intendentes del conurbano se mostraron unidos en señal de respaldo a Menéndez, quien había dicho contar “con el apoyo del 98% de los intendentes”. La lista que encabeza el jefe comunal de Merlo reúne en sus filas a sectores del massismo y el randazzismo y busca “repatriar” a dirigentes que en el último tiempo se alejaron del espacio. Felipe Solá, aliado de Massa en 1País, fue uno de los que respaldó públicamente su candidatura.
Los intendentes que respaldan a Menéndez se mostraron unidos
Por su parte, el exintendente de La Matanza estuvo acompañado por Magario y por Jorge Ferraresi, el intendente de Avellaneda y uno de los hombres más allegados a la expresidenta. A su vez se respalda en el apoyo de los intendentes del interior y asegura que, de darse la interna, podría llegar a juntar hasta 150.000 afiliados en su distrito.
Tras la jornada de ayer la elección del 17/12 parece encaminarse hacia una interna, aunque aún no está dicha la última palabra. | 
