De acuerdo al ’Informe Mensual de Finanzas Públicas y Deuda Pública Enero-Octubre’, el Saldo Histórico de los Requerimientos Financieros del Sector Público (SHRFSP) –que es la medida más amplia de la deuda pública– se elevó a 9 billones 617.2 mil millones de pesos en octubre de 2017.

Este incremento equivale al 6.07% respecto al monto registrado en octubre del año pasado cuando se ubicaba en 9 billones 66 mil 466.9 millones de pesos, por lo que el aumento se fija en 550 mil 714.4 millones de pesos.

El componente interno de la deuda se ubicó en 6 billones 43.8 mil millones de pesos, mientras que el externo fue de 186.6 mil millones de dólares (3 billones 573.4 mil millones de pesos).

Con estas cifras la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) redujo su estimado de deuda pública de 48% a 46% del Producto Interno Bruto (PIB).

Sin embargo, la reducción es un efecto del cambio de año base en el Sistema de Cuentas Nacionales de México (SCNM) - fijado por el INEGI- que cambió del 2008 al 2013.

La SHCP indicó que con el PIB base 2008 se anticipaba una reducción de 50.1 a 49.5 por ciento del SHRFSP. Considerando el Remanente de Operación de Banco de México (ROBM) esta estimación disminuye al 48%.

Pero con el cambio de año base del PIB el SHRFSP se reducirá de un nivel de 48.7 por ciento al cierre de 2016 a 48.2 por ciento sin ROBM y 46.7 por ciento con ROBM.

Hacienda indicó que entre enero y octubre de 2017, los ingresos presupuestarios aumentaron 1.2% real respecto al mismo periodo de 2016 y fueron mayores a los previstos en el programa en 538.8 mil millones de pesos.

Además el gasto neto presupuestario fue inferior en 6.9% real respecto al mismo periodo de 2016 y menor a lo previsto en el programa en 15.9 mil millones de pesos. El balance primario (superávit) a octubre ascendió a 480.8 mil millones de pesos, cifra que representa 4.7 veces al registrado en 2016.

La realidad de la deuda

A pesar de que según la Secretaría de Hacienda, las cifras del balance primario se consideran favorables, lo cierto es que la deuda continúa a la alza. No solo el crecimiento del 6.07% respecto al monto registrado en octubre del año pasado sino el impactante incremento en poco más de una década. Pues en el 2005 a finales del gobierno del panista Vicente Fox la deuda representaba el 28% del PIB y actualmente el 47.6.

Este aumento de la deuda ha hecho a analistas internacionales, como Standard & Poor’s, advertir sobre la situación en México.

Dentro de los factores críticos que se reconocen para la economía mexicana y el crecimiento de la deuda está la depreciación del peso, el incremento del déficit fiscal y la asistencia financiera gubernamental a Petróleos Mexicanos (Pemex) y a la Comisión Federal de Electricidad (CFE).

Pero en el caso de la asistencia a Pemex y CFE se debe considerar todo el dinero que se va en desvío de fondos y corrupción para contratos y concesiones.

Mientras la deuda a particulares y otro países se paga puntualmente y con los intereses impuestos -llegando a pagar incluso varias veces el valor de la deuda inicial-, el gasto a educación y salud se limita cada vez más con los recortes presupuestarios y el avance en la privatización, empeorando las condiciones de vida de las y los trabajadores y los sectores populares.