Se dio a conocer el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC), elaborado por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
La tasa anual de inflación en el onceavo mes del año, que alcanzó 6.63%, fue más alta de lo que preveían a lo esperado por analistas consultados por Bloomberg, quienes estimaban un aumento de 6.61%.
Se superó el nivel de octubre, cuando había llegado a 6.37% anual. Así es que este índice está por encima del objetivo previsto por el Banco de México (Banxico), que debía ser de 3 +/- 1 punto porcentual.
Según el desglose, el componente subyacente del índice –que sólo incluye el desempeño de los bienes y servicios de consumo, sin contar precios de agropecuarios y las tarifas predeterminadas como las de energéticos y transporte-, alcanzó a 4.9%. En este rubro, los servicios registraron alza de 3.79% y las mercancías, 6.19%.
Es el índice de precios de frutas y verduras –productos de la canasta básica- el que más se incrementó: de 13.21% en octubre a 14.91% en noviembre. Mientras tanto, los energéticos (combustibles) pasaron de 16.34 a 17.04%. Esto provocó el encarecimiento a lo largo de 2017 el costo del transporte de mercancías y de personas.
En cuanto al componente no subyacente -que incluye precios de bienes y servicios influenciados por factores como el clima o los mercados internacionales-, registró un alza de la tasa anual a 11.97%.
Respecto al aumento de la tasa mensual, la inflación en noviembre se llegó a 1.03%, la más alta para este periodo en seis años.
Algunos aumentos que provocaron el alza inflacionaria son los del jitomate (9.69%), el huevo (3.27%), el tomate verde (15.7), la electricidad (24.69%), y el gas doméstico LP (6.32%), es decir productos agrícolas y combustibles de primera necesidad. |